miércoles, 17 de marzo de 2021

Un palacete en la Castellana

 

Hace cerca de 9 años Xesús Pisón nos escribió preguntándonos sí sabíamos sí el palacete de la foto que encabeza este artículo estaba en el Paseo de la Castellana. Sus antepasados tuvieron uno en la Castellana, pero desconocía sí el de la foto fue la casa de su familia y sí estaba en la Castellana. Desde un principio Xesús nos dijo que estaba convencido de que el palacete estaba en el actual número 60 del paseo de la Castellana.




Lo primero que hicimos fue ver todas las fotos aéreas que teníamos de la zona, pero no tuvimos suerte, no aparecía en ninguna de ellas (más adelante pondremos algunas fotos aéreas). Por tanto, nos pusimos a investigar sobre su familia.




 


Xesús nos contó que el último propietario del palacete de su familia fue Isaac Martínez Mon Moscoso, este era hijo de Juan José Martínez Valcárcel de Moscoso, perteneciente a una familia hidalga terrateniente de Lugo. Isaac tenía una hermana llamada Matilde y nos lo cuenta así:




“Isaac Martínez Mon Moscoso nació en Madrid en 1864, estudió Filosofía y Letras, pero nunca ejerció, ya que vivió siempre de las cuantiosas rentas familiares. Su vida fue una aventura casi literaria. Desde que murieron sus padres, se dedicó a viajar por el mundo con toda clase de lujos. Se sabe que visitó entre otros sitios: Lisboa, Londres, París, Austria, Egipto, Jerusalén, India, Filipinas... Estuvo en Rusia en la coronación del zar Nicolás II, también en Armenia, donde le sorprendió una persecución de cristianos de la que consiguió huir oculto en un carro de heno... Era muy generoso, dio un importante donativo para los niños huérfanos de Bombay por lo que recibió el agradecimiento del príncipe de la India Ghulam Mahammad Khan Bahadur.”




El primer paso fue buscar en los planos antiguos la situación de la casa. En el siguiente plano de 1906 vemos las construcciones que había en el lugar.




 


El palacete debía de estar en la segunda parcela después de la calle Pinar, junto a la actual Embajada de Portugal. En el siguiente plano del Catastrón de 1954-50, observamos ya la numeración de la calle, aunque de poco nos servía pues como vamos a ver cambió numerosas veces.




 


Buscando en la hemeroteca encontramos por primera vez que Matilde Martínez Moscoso ya aparecía con residencia en la calle Pinar 3 en una de las guías de 1886. Con posterioridad a la investigación Xesús encontró una escritura según la cual: "el padre de Isaac, Juan José, "le compró el palacete a don Fabián Gómez del Castaño, el 28 de mayo de 1885, ante el notario don Zacarías Alonso Caballero, poniéndolo a nombre de su segunda esposa, Ángela Mon y Moscoso". Este don Fabián era un millonario argentino y no pudo ser el vendedor del palacete, pues murió antes de esa fecha. De modo que tuvo que ser su hijo, Fabián Tomás Gómez del Castaño y Anchoreba, que se casó en España con María Luisa Fernández de Henestrosa y Pérez de Barradas."

 


Y en 1897 la esquela de Angela Mon, madre de Isaac y Matilde, con domicilio en el Paseo de la Castellana número 30.




 


Buscando por el número 30 de la Castellana, encontramos el siguiente anuncio de noviembre de 1898, en el que se sacaban a subasta cuatro solares. Esto se corresponde con lo que nos contó Xesús, que su familia siempre dijo que además del palacete tenían más terrenos en la manzana. Posiblemente son las parcelas aledañas a su palacete que daban al Paseo de la Castellana, o las posteriores de la calle Pinar.




 


En la guía de 1904 figura Isaac como propietario del Paseo de la Castellana número 46, primer cambio de numeración.




 


Después de aparecer el anuncio en la prensa, se alquiló el palacete al embajador alemán, según podemos leer en el contrato que nos facilitó Xesús.

 





Durante 1907 encontramos muchos anuncios en la prensa ofreciendo en alquiler el palacete de Castellana 46.




De nuevo, pero en esta ocasión en la calle Pinar 3, aparece Isaac en la guía de 1908, pero curiosamente también figuraba domiciliado en la calle Mayor, una incógnita, quizás tuviera el palacete alquilado y prefería vivir de alquiler en el centro de Madrid, aunque tampoco era lógico tener otro domicilio cuando él estaba constantemente viajando por el extranjero.




 


La noticia del fallecimiento de Isaac Martínez Moscoso la encontramos en la prensa.




 


Y Xesús nos facilitó la carta del Consulado Español de Manila que envió a su familia.




 


Tras un pleito complicado, pues según el testamento de Isaac este dejaba su herencia a dos bailarinas de París, salió a la venta el palacete de la Castellana. Así, en mayo de 1911, encontramos el siguiente anuncio.




 


La familia embarcó el resto de los enseres en tren y se los llevó a Lugo. A su vez se empezaron a publicar los anuncios de las subastas de las propiedades que Isaac tenía en Madrid, pero no aparecía el de la calle Mayor.




 


El palacete debió de ser vendido en esta última subasta pues, además de no volver a aparecer el anuncio en la prensa, en agosto de 1913 el Ayuntamiento de Madrid autorizó la construcción de un cocherón en la finca, y al mes siguiente la revista “La Construcción Moderna” anunciaba las obras en Castellana, 46. Suponemos que durante estas obras se demolió o se reformó totalmente el antiguo palacete y se construyó el palacete nuevo.




La compradora fue la Marquesa de Jurreta y Gamboa y Duquesa de Andría, quien según algunas informaciones de prensa hizo en su palacete de la Castellana “un verdadero relicario de estilo renacimiento español y gótico” sic, lo que nos da una idea de la importante inversión que debió de hacer la marquesa en su construcción. No obstante, en 1922 alquiló el palacete de Castellana 46 a los condes de Orlowski, ya que la Marquesa de Jurreta tenía otro palacete mucho más lujoso en la calle Miguel Ángel. La vida de la Marquesa de Jurreta, y sobre todo de su hija, son muy curiosas y recomendamos a nuestros que la echen una ojeada.




Como vemos hasta aquí todo es historia, pero seguíamos teniendo pendiente confirmar sí la foto era del palacete de la Castellana, la carpeta con la investigación seguía abierta en el escritorio del ordenador. Pero de repente hace unos días Julio García Moutón publicó en el grupo Historias Matritenses de Facebook unas fotos de la Fototeca del Patrimonio Histórico, del fondo del Conde de Polentinos, de las cabalgatas de carnaval que se celebraban en el Paseo de la Castellana. Aunque conocíamos las fotos no vimos nuestro palacete hasta que Julio citó que se veía la Embajada de Portugal, que sabíamos que lindaba con el palacete de Isaac.




En las dos siguientes fotos, fechadas en el carnaval de 1906, vemos a la derecha la embajada de Portugal, y de frente el palacete de Isaac, con los dos grandes cedros en su entrada.




 



Se ve que el Conde de Polentinos siempre se ponía en el mismo lugar, o un poco más al norte, pues tomó esta foto en 1909, casi en la misma posición que las de 1906.




 


Así se resolvió el misterio del palacete de la Castellana.




Al acabar la Guerra Civil en 1939 el nuevo palacete fue una sede de la Cruz Roja, como vemos en esta foto aérea del desfile militar en el Paseo de la Castellana (Colección Pepcor).




 


Mientras Madrid se preparaba para crecer en altura hacia el norte, la manzana seguía conservando su aire señorial de antaño, foto de Urech, Diario Madrid, año 1941.




 


Para finalizar, quizás la mejor foto del nuevo palacete, de la colección de Javier Romeu, tomada a primeros de los años setenta, pocos años antes de su demolición para levantar un edificio de oficinas en la parcela.



 


-.-.-

 




Agradecimientos: A Xesús Pisón por toda la información facilitada, y a Javier Romeu y a Julio García Moutón por su perseverancia en mantener documentos de edificios antiguos de Madrid.




Autor: Ricardo Márquez




En el blog Historias Matritenses participa también José Manuel Seseña Molina.