martes, 17 de febrero de 2009

Carnaval

DIARIO DE MADRID
Sábado 19 de Febrero de 1803.

BANDO
Manda el Rey nuestro Señor, y en su Real nombre la Sala de Alcaldes de su Casa y Corte: que desde hoy, y siguientes días de Carnaval, ninguna persona sea osada a tirar en las calles, plazas y paseos de ella, ni otro sitio, huevos con agua, harina, lodo, ni cosa con que se pueda incomodar a las gentes, y manchar los vestidos y ropas, y echar agua clara ni sucia de los balcones y ventanas con jarros, vexigas, ni otras cosas. Que no se pongan masas a persona alguna, a los perros ni demás animales; pena a qualquiera que contraviniere a lo referido en todo o en parte de ello de veinte ducados, y quince días de prisión en la Cárcel Real de esta Corte.


Este es un breve extracto del Bando que apareció en 1803. Pero vayamos en el tiempo a buscar los origines del Carnaval:

Era una fiesta de origen romano, totalmente pagana. Como con tantas otras fiestas (San Juan, Navidad,...) fue tomada por la religión cristina, pasando a ser los días anteriores que preceden a la Cuaresma (cuarenta días antes de la Pascua) y finaliza el martes con el Entierro de la Sardina previo al Miércoles de Ceniza.

La riña entre Carnaval y Cuaresma – Autor: Pieter Brueghel - El Viejo (1525-1569)
Hay tres teorías sobre el origen de la palabra carnaval. Una es que provenga del latín vulgar carne-levare, que significa 'abandonar la carne', otra venga del genovés carnavalare, que significaba “quitar la carne” y otra que venga de la palabra italiana carnevale, que significaba la época durante la que se podía comer. En cualquiera de los tres casos es debido a que en la Europa medieval la Iglesia prohibía comer carne durante toda la Cuaresma.

Carnaval en un pueblo – Autor: José Gutiérrez Solana (1886-1945)
Hernán Cortes instauró de inmediato el carnaval en México, y desde allí se extendió por toda América. Hoy en día se celebra en todos los continentes, excepto en Asía.

Disparate de Carnaval – Autor Goya
Es un tiempo considerado por muchos como de algarabía, mofa y desahogo, por otros como de vicio y caos. Así en Madrid durante las dos primeras décadas del siglo XX se celebraba el carnaval en el paseo de la Castellana, con concursos de carrozas y una gran participación, pero a finales de los años veinte fue trasladado al paseo del Pintor Rosales lo que ocasionó una considerable perdida de afluencia de público, volviendo durante la República de nuevo a la Castellana.



Durante la dictadura del General Franco, fueron prohibidos en toda España. En 1948 fueron autorizados los carnavales de Cádiz, pero no estaba permitido taparse la cara ni hacer sátiras o burlas a las autoridades. En otras muchas poblaciones se hicieron fiestas pero utilizando nombres de tipo cultura, para enmascarar el carnaval, curioso el juego de palabras, sirva de ejemplo de todas ellas la de Navalmoral de la Mata en la provincia de Cáceres que los llamó Juegos de Invierno. Con la democracia volvieron los carnavales a toda España.

Carnaval en el paseo de la Castellana – Finales de los años veinte del siglo XX. Carnaval en el paseo del Pintor Rosales – Año 1931. Cabalgata de carrozas en el Paseo de la Castellana – Madrid – Año 1935. Fuente: Memoria Visual de España.


El carnaval ha sido fuente de inspiración para los artistas, pintores como Goya, Picasso, Solana.... En el cine madrileño hay que destacar la película Domingo de Carnaval (1945) de Edgar Neville, donde nos introduce en un Madrid costumbrista. Mediante una estructura de sainete crea una trama policíaca en la que investigan un asesinato. En un doble juego muestra la tradición más popular de los carnavales y pasa de soslayo la censura filmando los carnavales que estaban totalmente prohibidos por el régimen.


En la película contó con su actriz favorita: Conchita Montes, y los actores Guillermo Marín y Fernando Fernán Gómez. Se cuenta que Neville estaba empeñado en que Fernando Fernán Gómez participara en el film, pero estaba en otro rodaje. Para suplirle cuando no podía estar en ambas producciones se utilizaba la mascara ya que el guión lo permitía y no desvirtuaba la historia.


Neville llega a recrear con una asombrosa precisión los cuadros de Goya y Solana sobre el carnaval en su film.


Seguidamente ponemos los cuadros sobre los que se basó Neville y la escena que corresponde con el mismo.
Goya “El entierro de la Sardina”


Cuadro de Solana




Autor: Ricardo.
En este blog también colaboran: Angel y José Manuel Seseña.

Fuentes http://www.encarnaval.com/, BNE y Filmoteca Nacional.

domingo, 15 de febrero de 2009

Viaje virtual en el tranvía C - Tercera Jornada



GLORIETA DE QUEVEDO-GLORIETA DE IGLESIA
El itinerario que yo, un tranvía General Electric, voy hoy a comentar me va ir permitiendo observar como se ha iniciado el inexorable declive de la red tranviaria por el centro de Madrid, y para corroborarlo ahí va la primera supresión que veo, la calle de Fuencarral, que se halla en el mismo punto de partida de esta etapa que comienza en la Glorieta de Quevedo.

Arranco mi viaje nostálgico iniciando una tercera etapa que me adentra en el castizo barrio de Chamberí a través de la calle de Eloy Gonzalo, el héroe de Cascorro. Desde Moncloa me ha venido acompañando, y así lo hará hasta llegar a Goya, la línea 61, renumerada como 71 en el ocaso tranviario, que va a ser la última absolutamente clásica que circulará por calles céntricas de Madrid compartiendo totalmente la calzada con los coches y los semáforos durante todo su recorrido, porque otras que la sobrevivirán lo harán por tramos de plataforma reservada e itinerarios por extrarradio donde hay menos intensidad circulatoria de vehículos.

Llego a la intersección con las calles de General Álvarez de Castro a mi izquierda y Trafalgar a mi derecha. Miro por esta última y encuentro que está todo muy cambiado, pues ya no está el mercado de Olavide, menos mal que su espacio lo han aprovechado para hacer una plaza ajardinada con un aparcamiento subterráneo de dos plantas suprimiendo el tráfico en tránsito que ahora pasa por debajo. La plaza me trae a la memoria noticias de que en los primeros tiempos de la línea de la 15, cuando aún yo no había nacido porque todavía no me habían construído, era el final de Chamberí de las dos ramas, la de Fuencarral y la de Hortaleza.

Llego a la Glorieta del Pintor Sorolla, vulgarmente conocida como Glorieta de Iglesia, donde está un templo que da nombre a la plaza y que tiene la advocación de Santa Teresa y Santa Isabel. También aquí fue el punto final de Chamberí de los servicios de la línea 15 cuando por diversas circunstancias que no vienen al caso la Plaza de Olavide se quedó sin acceso tranviario.



GLORIETA DE IGLESIA-GLORIETA DE EMILIO CASTELAR
Inicio una suave bajada que me llevará al Paseo de la Castellana por el Paseo del General Martínez Campos, que a pesar del tiempo transcurrido desde que fue cambiado a este nombre, hay quien todavía en mi época lo llamaba del Obelisco.

Al llegar al cruce con Zurbano tengo a mi izquierda la Casa-Museo del pintor D. Joaquín Sorolla, creado al donar su viuda al Estado las obras expuestas.

Poco después alcanzo la intersección de Miguel Ángel, la segunda visión de vías abandonadas que permitían acceder a la Plaza de Alonso Martínez.

Entro a continuación en la Glorieta de Emilio Castelar atravesando el Paseo de la Castellana. Un monumento en honor de este insigne orador y último Presidente de la Primera República preside la Glorieta, valga la redundancia, realizado por el escultor Mariano Benlliure, en el que hay diversas alegorías cuyo detalle no es para ser comentado aquí.


GLORIETA DE EMILIO CASTELAR-SALAMANCA
Salgo de la Glorieta de Emilio Castelar, llamada antiguamente del Obelisco a principios del siglo XX, y me toca afrontar la parte mas difícil del recorrido en las calles de General Oraa y Hermanos Bécquer donde está la rampa mas fuerte con el agravante de que en la unión de ambas tengo una curva muy cerrada que la he de tomar con precaución. Igual me pasa cuando hago el recorrido inverso pues tengo que circular por ella con moderación porque cualquier velocidad inadecuada en la pendiente o un problema de frenada me haría descarrilar. Recuerdo que poco después de empezar yo a circular por aquí ocurrió un desgraciado choque al final de la bajada con otro tranvía que circulaba por el Paseo de la Castellana ocasionando algún muerto y herido grave. Pero dejemos atrás los recuerdos tristes y sigamos adelante.

A punto de terminar la subida por Hermanos Bécquer me sorprendo al ver las tanquetas que protegen la embajada americana ¡Qué tiempos tan diferentes a los míos cuando las representaciones diplomáticas se consideran territorio inviolable sin necesidad de tener que tomar estas medidas precautorias!

Corono, al fin, esta difícil rampa y llego a la antigua denominación tranviaria de Salamanca, confluencia de las calles de Serrano y Diego de León, punto donde mis antiguos predecesores tranvías de sangre iniciaron su andadura hasta la Puerta del Sol el 31 de Mayo de 1.871 y que en honor a ellos he querido denominar así al final de esta sección. Es la tercera visión de vías sin servicio y el comienzo de mi recorrido por el Barrio de Salamanca, nombre que viene de su creador, el financiero y promotor de ferrocarriles José de Salamanca.

En el cruce de Serrano las vías de esta calle habían dejado paso tiempo después a un nuevo sistema de transporte llamado trolebús del que decían que era el futuro por su mayor movilidad y del que proyectaban crear una gran red sustituyendo algunas líneas de tranvías. De momento y excluyendo la de Vallecas que era punto y aparte, solo funcionaba ésta, la número 1, que iba desde la Puerta del Sol a El Viso, pero que por falta de lugar adecuado los vehículos pasaban la noche a la intemperie en el final de la Plaza de la República de El Salvador. A pesar de todos los vaticinios favorables, ninguna línea de trolebús nos sustituyó, en ningún momento su red fue mas grande que la nuestra, y además les sobrevivimos en algo mas de seis años.

Por cierto, que por recordar lo de los trolebuses, me había olvidado de comentar que ahora Serrano solo es de dirección única hacia la Puerta de Alcalá y la mención de la iglesia de San Francisco de Borja, sede de los jesuitas, construida en el lugar donde estuvieron las primeras cocheras de tranvías de Madrid que permanecieron en funcionamiento hasta que se abrieron las de Magallanes, citadas en la segunda jornada.


SALAMANCA-GUINDALERA
Tras pasar Serrano, tomo la calle de Diego de León, un joven general que en el siglo XIX “se la jugó” y le salió mal por lo que terminó sus días en el paredón; su ¿valor? ¿osadía? ¿arrogancia? ... en fin llamémoslo como queramos, le hizo solicitar una última gracia que le fue concedida cual era la de mandar su propio pelotón de fusilamiento.

Desde el punto tranviario de Salamanca, todavía me queda una pequeña rampa en el inicio de la calle de Diego de León, no tan fuerte como las anteriores, hasta llegar a la calle de Claudio Coello donde ya encuentro un tramo horizontal. Al llegar aquí vuelvo la vista a la derecha pues años después de desaparecer yo, sucedió un hecho histórico al morir en atentado el Presidente del Gobierno Luis Carrero Blanco cuyo coche saltó por los aires yendo a caer al patio trasero de la iglesia de San Francisco de Borja. Era el quinto presidente del Gobierno que en poco mas de cien años moría asesinado en España.

Desde Claudio Coello, ya es coser y cantar. Cruzo la calle de Velázquez con los enlaces tranviarios en obras a fin de proceder a suprimir el paso por la Guindalera de los tranvías de la Prosperidad y Ciudad Jardín desviándolos por esta calle hasta unirse en López de Hoyos con el antiguo trazado por Cartagena. Noto también muy cambiada la calle de Velázquez para adaptarse a los nuevos tiempos que todo lo pueden pues ahora es de dirección única en sentido desde Puerta de Alcalá para ser inversa a la de Serrano, no tiene bulevar y al fondo a la izquierda está el comienzo de un largo túnel que conecta con la autopista de Barcelona para “llegar antes al aeropuerto”.

La siguiente confluencia importante de Diego de León es la de Príncipe de Vergara, nombre que en mis tiempos fue sustituido por el de General Mola. También veo que ha desaparecido el bulevar aunque ha conservado la doble dirección. Recuerdo que el mismo día que empecé yo a hacer el recorrido C, también nació la línea 2 de trolebuses realizando a través de esta calle el itinerario Puerta del Sol-Ruiz de Alda, nombre que tenía la Glorieta de López de Hoyos en el periodo que estoy recordando.

Un nuevo cambio de denominación encuentro en mi camino, el actual de General Díaz Porlier, restablecido tras la época en que se llamó Hermanos Miralles.

Prosigo hasta llegar a la confluencia de Diego de León con Conde de Peñalver donde tengo a mi derecha, haciendo esquina, el Hospital de la Princesa, en construcción en mi época, nombre que hace referencia a la Princesa Isabel de Borbón y Borbón, madrileña de pro, conocida popularmente por “La Chata”, mencionada en la segunda jornada al hablar de la calle de la Princesa. Al fondo veo la calle Francisco Silvela, divisoria de los barrios de Salamanca y Guindalera y ¡como no! también sin el bulevar central desaparecido en aras a una mejora del tráfico rodado.

Finaliza aquí el recorrido por hoy, un lugar que verifico que sigue siendo un importante nudo de comunicaciones, ahora de metro y autobuses. Termino la etapa de este viaje virtual muy agobiado por tanto semáforo a los que no estoy acostumbrado, pero en la próxima etapa tendré mas de lo mismo.



Autor: José Manuel Seseña Molina
En este blog también colaboran: Angel y Ricardo.

Fuentes: Google Maps.

Artículo anterior.

jueves, 12 de febrero de 2009

El Día de los Enamorados – Madrid y el cine.

El 14 de Febrero es el Día de los Enamorados en honor de San Valentín, un sacerdote cristiano que en esta fecha sufrió martirio en el siglo III en tiempos del Emperador romano Claudio II.

En esa época se consideraba que un soldado soltero era en las batallas mejor luchador que uno que estuviera casado porque tenía familia que le esperaba al finalizar la campaña, razón por la cual estaban prohibidos los matrimonios en la milicia. Asimismo el cristianismo era una religión que no estaba permitida.

Escena de la película El Día de los Enamorados (1959). El actor Jorge Rigaud encarna a San Valentín en este films.
Es en estas circunstancias cuando San Valentín casa a los soldados en secreto, llegando su actuación a conocimiento de la máxima autoridad civil que decide su encarcelamiento.

Escena de la película El Día de los Enamorados (1959). La plaza de Colón de Madrid.
La Iglesia le canonizó dos siglos después nombrándole Patrón de los Enamorados, celebrando su fiesta en el Santoral el día de su martirio, para de esta manera dar fin a una fiesta pagana que se venía celebrando al día siguiente.

Escena de la película El Día de los Enamorados (1959). Estación del Norte (Madrid)

La primera referencia que aparece, y única hasta 1936, en las hemerotecas sobre San Valentín, como el Día de los Enamorados, es en 1929 y dice así:

Todos los enamorados de los Estados Unidos gozan de una época del año en que se permiten las más afectuosas libertades. Es el 14 de febrero, día de San Valentín. La costumbre proviene de una tradición irlandesa. Aquel día se va a misa por el novio, por la novia, se cambia el primer beso o se multiplican los ya recibidos.

Aquel día Eros y Cupido cambian sus atributos mitológicos por un corazón escarlata, traspasado por un dardo de oro. Este corazón y este dardo se reproducen hasta el infinito en sendas tarjetas postales. Las leyendas más poéticas suelen ilustrar estas tarjetas y el cable y el telégrafo cooperan con el correo para poner en contacto a los enamorados.


Escena de la película El Día de los Enamorados (1959). Actor: Francisco Bernal. Puerta del Sol (Madrid).
En 1959,bajo la dirección de Fernando Palacios se rueda en Madrid la película El Día de los Enamorados. El argumento trata cuatro historias de amor; unos vendedores que se pasan el día discutiendo, una locutora y un escritor, una manicura y un conductor de autobús, y una millonaria y un médico sin dinero. San Valentín (Jorge Rigaud) aparece en Madrid elegantísimo y con mucho glamour en el día de su onomástica. Utilizando toques de distinción ayudará a las parejas de novios en sus problemas.

Los actores del film son: Jorge Rigaud, actor argentino que hizo muchas coproducciones en España, Tony Leblanc, Angel Aranda, Katia Loritz, Concha Velasco, Manuel Monroy, Mabel Karr, Antonio Casal y María Mahor; así como grandes actores de reparto como: Francisco Bernal.

Debido al éxito de la película se hizo una segunda parte en 1962 titulada Vuelve San Valentín, con George Rigaud haciendo el mismo papel.

Fernando Palacios también dirigió entre otras películas: Tres de la Cruz Roja (sobre tres voluntarios que se apuntan en la Cruz Roja para entrar gratis para ver fútbol a Chamartín) y La gran familia.

En la actualidad es cuando este día tiene gran importancia por la publicidad mediática que lo rodea. Los establecimientos comerciales aprovechan para sensibilizar a las parejas de todas las edades, casadas y no casadas, para que se hagan regalos, y así ellos motivan sus ventas llenando el hueco de Febrero entre los Reyes de Enero y el Día del Padre de Marzo.

Escena de la película El Día de los Enamorados (1959). Los antiguos Galerías Preciados, en la Plaza de Callao.
Los presentes más habituales que se dan los enamorados son perfumes, joyas, ramos de flores y libros, además de una cena romántica.

Vídeo de YouTube - Escena final de la película, con la canción de Augusto Algeró interpretada por una tuna.


Autores: Angel, José Manuel Seseña Molina y Ricardo.
Fuentes: Filmoteca Española y BNE.

lunes, 9 de febrero de 2009

Edificios de la Ciudad Lineal - Villa Costa 86



Hoy vamos a poder analizar una aportación de uno de nuestros lectores, José Angel González, que nos ha remitido unas fotos de la casas de sus bisabuelos que estaba sita en la calle Arturo Soria en el actual número 86 (hasta los años 1955-1960 el nº de la calle era el 431 pues la numeración empezaba por Chamartín y no por la calla de Alcalá. Fuente José Angel), esquina a la calle de Fernández Caro, en la manzana aledaña en donde se encontraba el Hospital Militar del Aire.


En esta fotografía podemos observar que la casa debió de ser construida en 1921 o poco antes. Se observa la clásica construcción del tipo de casa del obrero que construía la Compañía Madrileña de Urbanización (CMU), aunque mucho más pequeña que la que aparecía en los folletos publicitarios de la Compañía. La fachada corresponde con una casa modelo número tres, dentro de la gama de las casas del obrero era la superior.

A la izquierda se encuentra un pozo con una polea, lo que indica que tenía agua. Según la CMU, empresa constructora de la Ciudad Lineal fundada por don Arturo Soria, no era recomendable hacer pozos porque no era seguro encontrar agua y la CMU suministraba agua por tuberías de mejor calidad que la que se extraía de los pozos. La mayor parte del agua suministrada por la CMU procedía del Canal de Isabel II, cogida del canalillo en el Ventorro del tío Chaleco, aunque la Compañía también disponía de pozos.

La CMU recomendaba construir dos pozos casi juntos en cada finca para las aguas fecales, de unos 20 metros de profundidad. Mientras uno llenaba, en el otro se echaba cal y una vez reducido su contenido podía utilizarse la materia como abono inodoro, poniéndose el otro pozo de nuevo en funcionamiento. Además recomendaba la construcción de un tercer pozo para las aguas de las cocinas, siempre que se lo pudieran permitir.

La CMU creía que la química avanzaría tanto que ya no sería necesario el alcantarillado, craso error visto desde nuestros días.


En la foto de arriba se puede apreciar la tierra recién movida y alisada, asi como las primeras plantaciones de árboles en la finca. Creo que la mayoría de ellos son acacias (recuerdo que en el jardín había varios pinos, castaños, un eucalipto, un nogal, laurel y varios lilos. Fuente: José Angel), que era el principal árbol recomendado por la CMU, junto con un par de higueras y uno o dos pinos por finca. Incluso la CMU alentaba a los propietarios a hacer semilleros para pinos y poderlos vender al cabo de los 10 años. Las higueras las recomendaba por el poco cuidado y riego que necesita, además de por sus frutos. Fue la autosuficiencia uno de los principios de la Compañía, incluso daban las instrucciones para la construcción de gallineros, palomares, conejeras, ….


La foto precedente se trata de un descanso con celebración, fíjensen en las botellas de sidra o cava. Esta sacada a la espalda de la casa, es decir hacia el Este ya que la sobra es total donde están descansando (descansan de trabajar, véase que una puerta hace las veces de mesa). Si observamos bien, entre la chica con coletas que está de pies(es la abuela de José Angel) y el señor con barba, se ve una figura muy alta cilíndrica. Creo que debe de tratar de la chimenea de la fábrica de electricidad para el tranvía de la Ciudad Lineal, es decir la foto esta tirada hacía el Norte.


La foto de arriba está escrita por detrás con la siguiente leyenda: "edificado en la Ciudad Lineal del 8 de febrero al 14 de abril de 1923". La toma está hecha desde la calle Arturo Soria. Según vemos han hecho el edificio principal cuya entrada daba a Arturo Soria, y se ve el ala izquierda que corresponde a las fotografías anteriores. Destaca la bandera, lo que indica que la construcción transcurrió sin ningún contratiempo. Los árboles ya han crecido bastante en apenas dos años debido a la abundancia de agua del pozo. Llama la atención en todos las fotos que las personas agarran los árboles, sin duda los tenían un gran cariño.



En la foto anterior vemos de nuevo a la abuela de José Angel, la joven con trenzas, y lo que confirma todas nuestras sospechas, el pozo con abundante agua, nada más hay que ver la humedad que tiene en su pared y la cantidad de cacharros que están llenando, botijos, cacerolas,....


Plano de gran resolución, para verlo más grande pulse sobre el plano.

En el plano anterior vemos la situación de la finca en 1929. En aquel entonces las construcciones eran todavía escasas, al menos en el lado Este de la Ciudad Lineal. La finca tenía forma de trapecio, y como vemos en el plano de más abajo, después sería un rectángulo como en el plano de compra. Posiblemente esto se debió a alguna orden municipal de urbanización o algún error del trazado del plano. No olvidemos que la finca perteneció a Canillas hasta 1949, pasando a depender después al Ayuntamiento de Madrid, por lo que no sería extraño el cambio de los planes urbanos.

También hay que destacar los dos arroyos muy próximos en el lado este, por lo que podemos comprender que el pozo tuviera agua.


Como se puede apreciar en la foto de arriba ya han pasado los años y esta casa no tiene nada que ver con la anterior. Las acacias han crecido, también vemos un hermoso abeto, unas exuberantes pitas, y un jardín muy frondoso. La casa estaría englobada en el tipo 4 de las construcciones de la Ciudad Lineal, que era la mejor de las de una planta.


En esta última foto se empieza a comprender un poco la diferencia de las casas. Si nos fijamos en la parte derecha se ve la casa que veíamos en la primera foto, por lo que el edificio tenía forma de “T”, siendo esta la entrada principal. Se ven las palomas, por aquello de la autosuficiencia, unas impresionantes hortensias en la entrada de la vivienda (estas entradas con pedestales laterales eran normales en las construcciones de la CMU, precisamente para poner plantas florales), el ramo colgado en la ventana, y los troncos las acacias ya han alcanzado buen grosor.

Plano de gran resolución, para verlo más grande pulse sobre el plano.
 
Como decíamos anteriormente la finca en los sesenta ya tiene forma rectangular. También vemos la forma de “T” que tenía la casa y las seis hileras de arboles perfectamente alineadas que flanqueaban el paseo que iba a dar a la entrada principal.


Villa Costa 86, en estado ya ruinoso poco antes de su derribo. Fuente José Angel, recorte de prensa.

En la parte sur vemos el solar donde se levantaría el Hospital Militar del Aire, y al otro lado de la calle Arturo Soria también hay un solar donde hoy se elevan viviendas de altura. 

Foto aérea del año 1969.


Foto aérea de la zona en la actualidad (2009), la finca remarcada de azul.

Villa Costa 86 fue derribada en los años ochenta para levantar un bloque de viviendas.

Añadido el 20/Abr/2009: Tras seguir la investigación sobre Villa Costa 86, y gracias a la
Fundación Juanelo Turriano, descubrimos que curiosamente no aparecía en la lista de propietarios de la Ciudad Lineal, editada por la CMU en 1928. También había muchas más fincas colindantes a Villa Costa 86 que no salían reflejadas en esta guía.

La respuesta la tuvimos en este plano (logo de nuestro blog), donde la finca aparece como Zona Rebelde.

Ahora entendemos que en la escritura de compra no apareciera la CMU. La explicación es que hubo propietarios de la zona que no quisieron vender a la compañía de la Ciudad Lineal los terrenos (los más destacados fueron Cavero y el Marques de Potuguale). No obstante estas fincas se beneficiaron de lo que era la Ciudad Lineal, y en todo momento respetaron el concepto y las normas de construcción de la CMU.

-.-.-
Autor: Ricardo Márquez.
En este blog también colaboran: Jose Manuel Seseña Molina y Angel Caldito.



Nuestro agradecimiento a: José Angel González.

Planos: Área de Gobierno de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Madrid.

jueves, 5 de febrero de 2009

Colmenar Viejo escenario cinematográfico.

En la población de Colmenar Viejo de 42.600 habitantes, al norte de Madrid, se encuentra la zona conocida como Dehesa de Navalvillar.
Localización del Poblado del Oeste.
Localizaciones en la Dehesa de Navalvillar.
En ella, ya en 1935, se realizó uno de los primeros rodajes cinematográficos, fue la película El 113, con temática sobre presidiarios y adulterios.
Los rodajes en dicha zona se paralizan debido a la Guerra Civil española hasta 1956.

Cartel de la película El 113.
A partir de esa fecha se reanudan los rodajes, con grandes producciones norteamericanas como Alejandro Magno, continuando con películas tan conocidas como: Espartaco, Orgullo y Pasión, El Cid y otras superproducciones. Dichos terrenos eran propicios para los rodajes de grandes batallas y como fondo el Pico de San Pedro que se podía hacer pasar como el Vesubio, Los Pirineos o Los Alpes, según las necesidades del rodaje.
Fotograma de la película El Cid, con la actriz Sophia Loren.
 Imágen actual de la Ermita de Nª Señora de los Remedios, donde se rodó parte del El Cid.

Además de grandes producciones en la Dehesa se rodaron Peplum (películas de Romanos) y Espaghetti Western.

El Poblado del Oeste, se empieza ha construir en 1963 y perdurará hasta comienzo de los años 70, rodándose una gran cantidad de películas, a su lado se encuentra la Base de Helicópteros (FAMET) del Ejército español.
Restos de los edificios del Poblado actualmente.
Fotograma del Poblado del Oeste de la película Joaquín Murrieta.

En dicha zona también se construyó en 1964 un Fuerte Confederado en madera, se realizó en condiciones climatológicas muy duras (fue un época de lluvias), para ello se utilizó la madera de un bosque que se había comprado.
El Fuerte Confederado Medina.

Para las filmaciones del Oeste se construyeron en la zona varios Ranchos, el más grande se le conocía como Rancho Cubero, nombre de su constructor.
Rancho Cubero.

Los otros Estudios de cine son los Estudios Verona, se encontraban en el Km 21,800 de la carretera de Colmenar Viejo. Sus comienzos fueron como zona de rodajes en exteriores de los Estudios Roma (hoy Telecinco), posteriormente siendo gestionados por otros socios se construyeron tres platós, pasando a llamarse Estudios Verona. En dichos estudios rodaron tres grandes directores del cine mundial como Pedro Almodóvar con la película Atame, Luis Buñuel con Tristana y George Cukor con Viajes con mi Tía, entre otros. En 1987 uno de los platós se acondiciona como Casa de Cultura y en 1991 se determina demoler los antiguos Estudios Verona.
Estudios Verona.


Escena de El viaje fantástico de Simbad rodada en los exteriores de los Estudios Verona

Interior de uno de los platós de los Estudios Verona

Vista aérea de 1975

Estudios Verona 1991

Estudios Verona 2010


En Colmenar Viejo se construyeron dos Estudios Cinematográficos para los rodajes de interiores. Los Estudios Tablada se encontraban en la Dehesa de Navalvillar, en ellos se rodaron películas tan conocidas como: La Petición de Pilar Miró y El perro de Isasi Isasmendi, entre otras.
Estudios Tablada, actualmente y al fondo se puede ver Madrid.
Fotograma de la película El 113.
-.-.-


Autor: Angel Caldito.
En este blog también colaboran José Manuel Seseña Molina y Ricardo.
Fuentes: Filmoteca Española y BNE.