Foto de la chimenea de Lasical, tomada desde el patio de una de las casas.
Fuente fotos:
El nombre sus calles era:
- De oeste a este: Govinda, José Romay, Vora, y Estrecho Bonifacio.
- De sur a norte, y transversales a las anteriores: Timor, Crisol, Estanques, Patos, Dardánelos y Tres Ochos.
Isabel Gea nos cuenta que un viejo librero que nació y vivió en el barrio la dijo:
¿Sabías que en ese barrio había una calle que se llamaba Tres ochos?, se refería a las ocho horas que trabajaba el ser humano, las ocho que duerme y las otras ocho para descansar del trabajo.
El barrio lo componían unas 200 casas, de una o dos plantas. Fue derribada en 1983 debido al plan de “embellecimiento” de los alrededores de la M-30. Sus vecinos fueron expropiados y en la actualidad hay edificios de viviendas, siendo sus calles Rafael Bergamín y Emiliano Barral.
Fotograma de la película El Crack, año 1981. Tomada en la M-30, sentido sur. A la izquierda se observa algunas de las casas. 
Al otro lado de lo que es hoy la M-30, frente a la Quinta de la Paloma, se encontraba la colonia Ibarrando, y el espacio que hoy es ocupado por los automóviles fue en su día un lugar de juegos, sobre todo para jugar al fútbol. Allí nació y se crió el famoso jugador de fútbol de la selección española Juan Señor. Como a él, conocí a mucho otros amigos (Tomás, Fernando,...) en el colegio anexo a la iglesia de San Juan Bautista, que estaba muy ligada a la Quinta de la Paloma.
Detrás de las ramas del árbol se ve la torre de la iglesia de San Juan Bautista. El gran desnivel que se observa es debido al uso de tierras que hacia Lasical. 
Recuerdo que mi madre me contaba que en la Quinta de la Paloma había unos bares con patios emparrados donde se hacían bailes, y acudían a ellos los jóvenes del Ventorro, Cerro de la Cabaña, Ibarrondo, San Pascual, Prosperidad, la Guindalera .....
Recuerdo que mi madre me contaba que en la Quinta de la Paloma había unos bares con patios emparrados donde se hacían bailes, y acudían a ellos los jóvenes del Ventorro, Cerro de la Cabaña, Ibarrondo, San Pascual, Prosperidad, la Guindalera .....
Foto de una calle de la Quinta de la Paloma.
También muchos vecinos recuerdan el canalillo, en el que de niños tuvieron mil aventuras con sus juegos.
Supongo que la foto esta hecha en la puerta de la casa de la calle Los Tres Ochos, donde vivía mi abuela. Calculo que la época en que está hecha es 1949-1950 y en ella está en la parte superior mi tía María, de pie. Debajo de ella en la siguiente fila, de izquierda a derecha mi tía Geni, mi abuela Antonia, otra persona que no identifico, mi madre y mi tío Basilio. Sentados, en la fila inferior, también de izquierda a derecha, mi padre, mi primo Julio, mi tío Manolo, otra persona que tampoco identifico y agachado junto a éste, mi otro primo Manolo, único integrante de la foto, junto con mi madre, que todavía vive. Texto: Juan Antonio Díaz (Nono).
Dejamos abierta la puerta para todo aquel que quiera aportar algún dato más de este barrio perdido.
Existe un segundo artículo.
Autor: Ricardo.
En este blog colaboran Ángel Caldito y José Manuel Seseña.
Autor: Ricardo.
En este blog colaboran Ángel Caldito y José Manuel Seseña.
Fuente fotos:
El Ultimo Caballo, película del año 1950 (blanco y negro); y El Crack, año 1981 (color).
Fuente libro:
Fuente libro:
CURIOSIDADES Y ANÉCDOTAS DE MADRID, de Isabel Gea. Nuestro agradecimiento por permitirnos citarla y el testimonio que nos ha relado.
Hola Ricardo, como ves, de vez en cuando voy pasando por aquí para ponerme al tanto de la "historias matritenses" que vas publicando.
ResponderEliminarQuería comentarte que cuando te refieres a la Colonia Ibarrondo alteras la primera "O" por una "A". Te lo digo por si es un a errata o simplemente una confusión con el nombre, pués siempre hay tiempo para corregir.
Por lo demás, te animo a que continúes en esta línea didaáctica tan amena e interesante que tanto me está permitiendo aprender.
Un saludo,
Enrique.
Hola y gracias Enrique,
ResponderEliminarError de dedo, gracias por avisar. A ver si entre todos vamos dejando recuerdos de la historia de nuestra ciudad.
Ricardo.
Hola me llamo eduardo y viví en ese barrio desde el 67 hasta ejecucion de la expropiacion. el comentario amable lo haré cuando pase por madrid y ademas enviare algunas fotos de los 60s.El triste es que en lugar de embellecer los terrenos con jardines como estaba en el plan,el ivima en connivencia con el obispado(los terrenos del realojo pertenecieron a la marquesa de amboage que a su muerte se los cedio a la iglesia a tal fin)vendieron para la construccion de esos mastodontes que enbellecen menos que un barrio de casitas rehabilitado.En fin la parte melancolica es ver que alguien se acuerda de el barrio de mi infancia del que guardo inmejorables recuerdos. si algien quiere saber mas que pregunte, cn placer contare cosas o aportare documentacion.
ResponderEliminarBuenas noches, en relación a su comentario, me gustaría saber más sobre esa expropiación de la que Usted habla, y que ocurrió con las personas que vivían aquí, e. El barrio de la paloma, concretamente en la calle emiliano barral (actualidad)muchas gracias, si me deja su correo electrónico para poder enviarle más datos. Gracias de nuevo
EliminarHola Eduardo, bienvenido al blog. Soy Ricardo y yo viví en el Cerro de la Cabaña, teniamos como punto común la iglesia, la berbena de San Juan, el campo de fútbol, el cole,....
ResponderEliminarSerá un placer contar con tus vivencias, tus relatos, y con todo lo que quieras aportar. Tienes las puertas abiertas incluso para si quieres publicar algunos artículos.
Contamos con alguna foto más de la Quinta de la Paloma. También sabemos que hay gente del barrio que ha visto el artículo, y tratamos que entre las aportaciones de todos consigamos mantener unas historias tan entrañables.
Es nuestra intención ir viendo, y reviviendo todos los pequeños barrios: Ibarrondo, La Colonia del Mahou, Las Cuarenta Fanegas, San Pascual,..... y desde luego que casí todo ya esta escrito, pero lo que no son nuestros recurdos, eso es inedito.
Un saludo.
Ricardo.
yo tambien vivi en un barrio ya desaparecido se llamaba san pascual y me gustaria que alguien me aportara fotos o vivencias ya que no consigo encontrar nada.
ResponderEliminarHola Paloma, se bienvenida al blog.
ResponderEliminarSoy Ricardo, el que lleva en el tema un poco más encima de los barrios. Por supuesto que tenemos previsto el publicar sobre San Pascual. De hecho tengo fotos inéditas de mi familia y bastantes datos sobre San Pascual, pero lamentablemente no contamos con ningún relato.
Estaría muy bien el poder contar con alguna vivencia tuya, eso es más ameno que cualquier dato e incluso enviarte a ti el borrador por si puedes aportar datos sobre las fotos. Además en San Pascual tenemos pendiente los estudios Moro, y estudios discográficos (esto de mi compañero Angel).
En proyecto tengo el ir abordando los barrios que estaban, y están, pegados a Av. de América: Ibarrondo, la colonia El Mahou, Parque de las Avenidas, .....
Esperamos que te animes a colaborar.
Saludos.
Simplemente haceros un comentario,(Ibarrondo), también se le llamaba el Barrio de la Humedad.
ResponderEliminarAh!, la Quinta de la Paloma también tenía un colégio que se llamaba o le llamabamos, los Patos.
Es posible que se haya olvidado que existía una vaquería, que cuando éramos pequeños íbamos con nuestras cantaras de aluminio a comprar la leche diariamente
Mil gracias Alfonso. Unos recuerdos de lo más entrañable. Tomaré nota para la segunda parte de La Quinta de la Paloma. Imagino que el colegio estaría en la calle del mismo nombre. Otra cosilla, sobre que años son los datos que nos das.
ResponderEliminarReitero el agradecimiento por tu ayuda.
Ricardo.
gracias por contestar.Me dices que cuente vivencias sobre mi barrio SAN PASCUAL. Son muchas, de lo que mas me acuerdo son de las noches de verano, viviamos en un patio de vecinos, en el que eramos todos de la familia de hecho mi nombre me lo puso una vecina. por las noches saliamos al patio todos y alli podia pasar de todo.a veces mi vecino jose sacaba el tocadiscos y nos poniamos a bailar, canciones de tony ronal, o nos ibamos a la fuente que estaba abajo de casa y con una manguera nos duchabamos todos, y a todo el que pasaba, cuando nos iban a reñir nos escondiamos, y vuelta a empezar. tendria para contar mucho, son recuerdos muy entrañables, y me gustaria alguna foto o algo de alli
ResponderEliminarun saludo
Paloma
Hola Paloma. Gracias a ti por contarnos tus recuerdos. Imaginó que la canción de Tony Ronald sería el Help. También en mi barrio había fuente, y nosotros al juego lo llamabamos la manga riega,.... que aquí no llega,... dependia del que tuviera el agua, si sabia apretar mojaba a muchos... En fin, daré preferencia a San Pacual, espero publicarlo en pocos dias.
ResponderEliminarHola ricardo. He seguido con entusiasmo todo lo que has publicado sobre mi querido barrio,muchas de las cuales desconocia.No sabia que fuera tan antiguo.Comentas como que era considerado como un barrio un poco marginal,ciertamente alli vivia gente humilde,trabajadora pero honrada y muy divertida. Nuevamente te doi las gracias, por el esfuerzo que has tenido que hacer, seguire atenta a lo que sigas publicando
ResponderEliminarUn saludo
Hola Paloma y gracias por tu comentario. La Quinta de la Paloma, San Pacual, El Cerro de la Cabaña(mi barrio), San Blas, Vallecas... etc, etc,... eran barrios de gente humilde, pero trabajadores como el que más, y había gente buena y mala, como en todos los sitios. Sin embargo "la mala fama" eran habituales. Para realizar los artículos intento quitar este tipo de malas referencias (te aseguro que hay muchas), pero también es muy dificil el encontrar a alguien como tu que conociera el barrio, que seguro que era como el mio y todos los de aquella época, y los pueda desmentir. Era nuestro gran mundo.
ResponderEliminarHola Alfonso que ilusión saber que conoces el colegio los Patos, claro no había más que este, posiblemente recordaras el nombre de la profesora Dª Teresa y que el colegío estaba partido en dos partes, uno para los chicos y el otro para las chicas, que recuerdos tan entrañables y a la vez tan tristes. Digo esto porque yo he pasado mi niñed en el barrio arta de subir agua y pasar muchas necesidades, pero a fortunadamente eso es historia y hoy lo recordamos con nostalgía. Un saludo Paquita.
ResponderEliminarHola Paquita. Muchas gracias por intervenir en el blog. Leyendo tu comentario he recordado una entrevista en la radio a una profesora que se jubilaba este curso. Viendo las fotos que yo tengo de pequeño (son del colegio que había en el Cerro de la Cabaña) y a raíz de tu comentario estaría bien que utilizáramos el blog como homenaje a nuestros profesores, que tanto hicieron por todos nosotros.
ResponderEliminarSaludos.
Ricardo.
Hola, Soy Paco, viví en la calle Jose Romay 2 hasta los 17 años, cuando nos tocó subir a los pisos de la iglesia, por tanto pasé mi niñez y gran parte de mi adolescencia en la Quinta. Mis recuerdos son muchos y generalmente agradables, viviamos todo el dia en la calle, conociamos a todos los vecinos, un dia nos peleabamos con los chicos de Ibarrondo y al dia siguiente estabamos jugando un partido de futbol, todo el dia haciendo "casetas", con las bicis, poniendo ballestas, poniendonos tibios de agua en las fuentes, en fin... Yo no fuí a Los Patos, fuí al colegio de la iglesia. Ahora, cuando voy a visitar a mi madre, que sigue viviendo en los pisos, no conozco a nadie, se ha perdido el contacto, los chicos no disfrutan como nosotros lo hicimos jugando a veces entre el barro, otras saltando en "los sacos" al lado de Ibarrondo, o "explorando" por lasical. Saludos a todos
ResponderEliminarHola Paco. Mil gracias por tu comentario. La verdad que de cada uno podíamos sacar toda una historia para este blog, desde los colegios, hasta lo que eran nuestros juegos. Recuerdo que cuando era pequeño se decía que en Lasical había un guarda que disparaba sal con una escopeta de perdigones, que había cientos de bolas blancas de china en sus alrededores, ..... De los pájaros,... todavía me parece estar excavando y buscando hormigas de ala cuando empezaban las lluvias en Septiembre, los grandes botes de cristal que utilizábamos para mantenerlas vivas (tenían que estar vivas, y los alines no valían), nuestras discusiones sobre si eran mejores los cepos o las ballestas. Del futbol: los grandes partidos entre barrios, El Condor, los del Cerro (bar Teherán que era donde yo jugaba y cogimos el nombre de Plus Ultra, cuando este desapareció) , y por supuesto los de la Quinta,... los más temidos, por aquello de Juan Señor.
ResponderEliminarSi todo va bien publicaremos el artículo de la Iglesia de San Juan Bautista para el fin de semana.
Saludos.
Hola Ricardo:
ResponderEliminarSoy Paquita, gracias por contestarme al escrito que te mandé. Te cuento, soy una señora de sesenta y cuatro años y viví en el barrio desde los cuatro años hasta los veintiseis, toda mi infancia la pasé en la Quinta de la Paloma, el colegio del cerro de la cabaña lo conocí, pero yo del que tengo recuerdos es el de los patos, que estaba dentro del mismo barrio. En los años 50 como podrás entender eran tiempos muy difíciles y la enseñanza pública era muy deficiente, particularmente con las niñas. El colegio era una nave que estaba dividida en dos mitades, una para los niños y la otra para las niña y solo se abría cuando venían una vez o dos al año unas señoritas que daban conferencias para los papas, te podrás hacer una idea para lo que venían aquellas señoritas.
Ricardo, siento no poder colaborar en este homenaje a nuestros profesores, porque yo no tuve la suerte que tuvísteis otros niños, ya que lo que aprendí de mi profesora fue imposición, rezos, maltrato, humillación y castigo. Cómo me alegro que muchos niños tengan tan buenos recuerdos de sus profesores y te animo a ese bonito homenaje.
Hay muchas cosas que recordar del barrio, sobretodo cuando llegaba el otoño y todo el barrio estabábamos buscando setas, que por cierto, eran hermosisimas, y hasta creo recordar que era bueno por tenerlo bien estercolado, ya sabes, el WC del barrio estaba fuera de nuestras casas.
Un saludo para todos mis antiguos vecinos, Paquita
Hola de nuevo Paquita. Siempre es una alegria poder leer tus recuerdos, aunque en esta ocasión sean un poco triste, tienen cierta nostalgía y alegria a la vez.
ResponderEliminarSería un logro que este blog sirviera de punto de reunión de los antiguos vecinos.
Si alguien tiene alguna foto, se podría hacer una tercera parte con todos los datos que vaís aportando.
Saludos.
mi madre vivio en el barrio de ibarrondo y me gustaría si tienes alguna foto del barrio que la publicases. muchas gracias
ResponderEliminarHola Ana. Si tengo fotos de Ibarrondo. Tenemos previsto hacer una entrada sobre Ibarrondo, y otro sobre la Colonía el Mahou. A mi me unen lazos familiares con ambos. Tenemos muchos trabajos por realizar, pero la busqueda y comprobación lleva mucho tiempo, por lo que os pedimos un poco de paciencia. Disculpar.
ResponderEliminarhola,paco yo tambien fui al colegio san juan bautista,recuerdo los partidos del recreo eso era futbol en estado puro,un partido diario y sin rotaciones y encima las chicas animando,yo naci en el 1959 y recuerdo a la señorita Mery a don enrique,don recaredo,y alguno que recordare y por supuesto al señor trenado que era el guarda del colegio y nos traia a mal traer,pero era un tio inteligentisimo.
ResponderEliminarpor cierto yo tambien voy por el barrio a menudo y me siento un extraño,una lastima pero asi son las cosas.
bueno seguire en otro momento con estos agradables recuerdos un aludo para todos y hasta pronto.
Hola Llo vivi en la quinta de la paloma y fui al colegio los patos Con juan Antonio señor jugavamos al futbol y éramos muy felices yo me yamo Francisco y vivía en José romay numero3
EliminarMuy bueno David, que bonitos recuerdos y que memoria. Yo fui solo un año al colegio de la iglesia, con 7 años, porque prohibieron la asistencía de niños cuando ibamos a empezar el curso en el colegio del Cerro de la Cabaña, el que estaba junto al Terán. Recuerdo con mucho respeto y miedo a don Enrique, con el que debía de haber estado ese curso, pero como no contaban con nosotros me metieron a la clase de don Recadero, de segundo a octavo,.... ahí es nada. Perdí un año, pues el hombre no daba para tanto. A mi me apasionaban los columpios, aunque hoy en día no pasarían ni la más mínima medida de seguridad. El año en el que estuve fueron las bodas de plata (creo) de don Jacinto. Estuvimos una semana jugando y había bebida gratis para todo el barrio. Creo que fue un poco antes de San Juan.
ResponderEliminarYo nací en el 61, por lo que seguro que coincidimos, y si parabas en el Teran conocerás a Alex, Miguel, Charly, Felix,... A ver si entre todos podemos ir contando lo que era el barrio y como viviamos en aquel tiempo.
Un abrazo.
que tal ricardo,claro que los conozco a todos y muchos mas a felix sobre todo era es mi colega y aun seguimos en contacto,pasamos muchas batallas juntas,ten en cuenta que el vivia en nº14 y yo en 6 de las casitas,recuerdas a nano,eramos uña y carne pero a raiz de su fatal accidente,(se quemo),fuimos perdiendo esa amistad tan entrañable que teniamos.
ResponderEliminaren breve os pondre una foto de la tropa de teran en un partido de solteros contra casadnos,de vez en cuando la veo y me destornillo de risa a la vez que siento una profunda nostalgia,pero sana eso si.
recuerdas a felipin,claudio.paquito teran.carlos plaza,manolo sabater y su hermano juan ,nosotros parabamos mucho con las motos y la mayoria tenia alguna,mejor o peor pero habia mucho ambiente motero.
tambien recuerdo las partidas de dados eran tremendas.
aver si me dices como puedo subir fotos y de vez en cuando subo alguna,me tocara pasar por donde mi madre a rescatar el baul de las fotos viejas lo que pasa es que no me deja quitarle ni una,las tendre que escanear.bueno no me enrrollo por que sino me dan aqui las tantas.
un saludo a todos
Ya sé quien eres David.... nunca se me olvidará cuando ibaís con las motos a dar saltos en la curva de salida de la M-30 entre Ivisa y la iglesia, cuando estaban las obras. Era los domingos por la mañana y allí ibamos todos a ver quien tomaba más altura con las Ossas, Bultacos,... de 250cc, y alguna Puch de 50,.. Yo al ser un poco más joven que tu no iba con vosotros, y díficilmente te acordaras de mi. Si conozco a alguno de los que mencionas, pero se entremezclan los recuerdos para saber quien son exactamente.
ResponderEliminarLo de las fotos me las tienes que enviar a mi, o bien subirlo a un sitio público, (flickr, paramanio,....) y darme el enlace para ponerlo en el blog. Yo te aconsenjo que mejor me las envíes.
Un abrazo.
Ricardo.
buena memoria ricardo,si realmente lo pasabamos bien dando saltos como las ranas,aunque la mayoria de las veces acababamos con la moto destrozada,estoy seguro que te conozco aunque sea de vista,si vivias cerca de terán seguro,por que conocia a todos los del barrio,por cierto te acuerdas de una tienda que habia detras de teran donde ibamos a comprar chuches,¿se dice asi ahora,verdad? lo conociamos como emeterio,y tenia de todo desde,golosinas hasta lapices, cuadernos,etc.
ResponderEliminartambien recuerdo la tahona y el olor a pan recien hecho,posiblemente el mejor pan de madrid,venia gente de todo madrid a comprar el pan,que recuerdos.
bueno aqui estoy para lo que necesites,si me necesitas para seguir haciendo crecer es te blog,cuenta conmigo.
hasta pronto
Hola David. En la tahona trabajo mi abuelo. De pequeño recuerdo que salián las mulas con los carros para repartir el pan. Lo de Emeterio, creo que te refieres a la cacharreria, alli había de todo un poco y si que era donde comprabamos los sacis, el pan de hijo, los cromos, las peonzas,.... Otro sitio era una casetilla que estaba entre la iglesia y la entrada al cole, muy cochabronsa y que olia fatal,...
ResponderEliminarEscribeme a mi correo rmrmarquez arroba yahoo.com y hablamos para el artículo que todavía tengo pendiente del barrio.
Un abrazo.
Hola a todos los que vean esta página
ResponderEliminarMe llamo David, mi familia, por parte de madre, vivió en la Quinta de la Paloma. Sólo tengo vagos recuerdos del barrio, puesto que mis padres tienen la casa por la zona de Esperanza-Canillas.
De la casa de mis abuelos, recuerdo algo del salón, la zona de la calle, pero lo que nunca se me olvidará serán las lágrimas de mi abuela el día que tiraron la casa. Yo tenía 6 años entonces, y no se me olvidará la piqueta derribando la casa que mi abuelo hizo con sus manos.
Por si alguien los recuerda, mis abuelos eran Mauricio Viejobueno y Leonor Caracena. Mis tios, Angel y Carlos (ya fallecidos), Simón, Paco y mi madre Angustias.
De todos ellos, los que más cerca han vivido o viven de la Quinta, son mis tios Carlos y Paco, los cuales pudieron obtener ambos pisos en los que se construyeron junto a la Iglesia de San Juan Bautista. Lo bueno/malo, es que las ventanas de sus casas daban a los terrenos de La Quinta.
Saludos y espero que mi madre aún conserve alguna foto de la Quinta para poderla incorporar
Hola David. Encantado de leer tus palabras. Seguro que alguien de los que visitan el blog, y este artículo en concreto, conoce a tu familia. Esperamos que tengas suerte.
ResponderEliminarSaludos.
Hola David, como me alegro de poder leer algo escrito por un hijo de mi amiga Angustias. Espero que tengas la gentileza de darle a leer esto a tu madre, en cuanto lo lea va a sentirse muy feliz, tu madre es una gran mujer y tus abuelos, a los que yo conocí, eran personas muy respetables y muy buena gente. Lo que más me sorprendía de ellos era su seriedad y su honestidad, de tus tios y sobretodo de Angel fue un gran amigo de mi hermano y de mi marido, lo que más siento es lo que ha padecido desde joven con su problema de corazón. Hace muchos años ya ingresó por primera vez en un hospital en la c/ Arturo soria, no recuerdo el número, pero alli fuimos mi marido, entonces mi novio, mi hermano y yo. Tengo que decirte David que tu tío Angel era un hombre muy querido por toda mi familia, y te digo más, a tu tio le gustaba gastar muchas bromas a cualquiera, pero la gorra con rabillo que mi padre tenía era su preferida, le fascinaba quitársela a mi padre, y ya te puedes imaginar cómo se enfadaba éste, que le tiraba la garrota con fuerza hacia los pies para que se cayese, pero tu tio como era joven y muy agil, siempre se libraba.
ResponderEliminarBueno chaval, estoy muy contenta de poder haber entablado una comunicación contigo. Espero volver a leer tus escritos y saber de tus padres y como no, de todos vosotros. Un fuerte abrazo para todos y en particular para mi amiga y vecina Angustias.
Paquita
Hola Javier, Ricardo tiene mi correo si quieres hablar conmigo pídeselo. Tambien se lo digo a la madre de Gloria, si le apetece escribirme, no tengo incombeniente en contestarla, saludo para todos, Ricardo gracis por tu amavilidad.
ResponderEliminarhola david,recuerdo a toda tu familia.tus abuelos eran personas sencillas y entrañables, era amiga de tus tios y tu madre,soy carmen la del puesto de frutas enfrente de la bandera.pero era vecina de tus abuelos.Emeterio vendia las chuches en la puerta de la iglesia en una cesta .ANONIMO
ResponderEliminarhola a todos,carmen el que vendia las chuches en la puerta del colegio,no era emeterio,se llamaba
ResponderEliminaralfonso y era cojo,vivia en las casitas,en el numero 24 yo viviva en el 6,lo recuerdo perfectamente.
aprovecho para felicitaros las fiestas de navidad a todos y que sigais con este blog,pero me encantaria que pusieseis alguna foto,
el colegio de los patosy mi maestra teresa,era rigida,pero buena persona.Yo la tenia arta,porque con 12 años ya no me podia enseñar mas.Me dio el peloton de las torpes y en seis meses sumaban,restaban,multiplicabacon decimales.No eran tan tontas,solohabia que explicarselo mejor.Un beso para todas.GLORIA MORENO PARICIO
ResponderEliminarHola a todos,DAVID he leido que Juan Señor se crio en Ibarrondo.No es cierto,se crio en la Quinta.Su padre se llamaba Juan y su madre Goya,y vivian en el patio de la sra.Paula,que daba a la actual M-30.Su hermana Goya iba conmigo al colegio de los Patos.Sus padres eran andaluces.Y al niño que era muy serio,no dejaba nunca el balon,siempre lo llevaba puesto.
ResponderEliminarHola a todos. Me llamo Paco. Naci el año 1944 en La Quinta de la Paloma. En el bar SOTERO. Vivi 20 años en el barrio y guardo muchos y gratos recuerdos de toda la gente. Os seguire y deseo buena suerte y que salga un buen articulo. animo.
ResponderEliminarBienvenido Paco. A ver si encontramos más material gráfico (fotos y planos) y preparamos una nueva entrada.
ResponderEliminarhola a todos,parece que este blog ha muerto,espero reactivarlo,soy david de las casitas,y estoy recopilando una fotillos para animar el cotarro.
ResponderEliminarhasta pronto
Hola David, encantado de verte de nuevo por aquí. Estos meses de vacaciones y calor se nota mucho que la gente está por la calle y entra menos al blog, además suele ir por barrios (nunca mejor dicho) los comentarios.
ResponderEliminarCuando quieras puedes eviarnos las fotos, alguna entrada prepararemos con las tuyas y alguna nuestra.
Saludos.
Hola David.
ResponderEliminarSe por tus comentarios que eres de las casitas,quisiera saber de que familia eres,quienes eran tus padres, en que nº vivias, yo soy un nieto de la sra. Petra.
Un saludo.
Pedro Aguilera Simon
ResponderEliminarHola Ricardo,vivi en la quinta desde los dos años hasta la expropiacion, soy hijo de la sra Paca y de Juanito el de Obras publicas viviamos en la c/ Jose Romay 8 y como comprenderas mis recuerdos son muchos y mas que se despiertan al leer todo lo que habeis escrito.
Recuerdo , La Bandera ,Sotero , las vaquerias sobre todo la del señor Paco a la que ibamos acomprar todos los dias leche recien ordeñada,la del negro etc.,tambien el quiosco=verduleria , la pescaderia de la sra aquilina,la panaderia del sr. Manolo ,la carboneria del sr Ino del que luego su hija se caso con un hermano mio.
Estuve de monaguillo con D. Jacinto; D. Pedro, D. Jose Luis ; con compañeros como Pepe que vivia en la fabrica de caramelos de Angel Muñoz y tambien con Fernando que por desgracia murio despues de una larga enfermedad siendo muy joven.
Mis hijos estudiaron en el Paidos y despues en el San Juan ,yo recorri primero los Patos luego el Paidos despues el de la Iglesia y despues el Ramiro de Maeztu de Serrano, etc.
como conocer pues conocco a mucha guente del barrio al haberme criado alli, los vecinos de la casa alta, a luisito de la carpinteria de Vicentin, sus hermanos y hermana, gente de los tres ochos como las hermanas loli y paqui su prima maribel que se caso con un amigo que se llamaba fede ,etc
Como creo que alguno de los que me conocen lo leeran saludos a todos cuando querais algo de mi aqui me teneis.
UN SALUDO
Pedro Aguilera
ResponderEliminarDe nuevo aqui, me da mucha alegria encontrar por aqui a antiguos vecinos y amigos como Justito hijo de la sra Petra de la cual tengo un gratisimo recuerdo por lo buena que era con todo el mundo, creo que Justito recordara mas a mi hermano Paco del que era muy amigo; Carmen nuestra verdulera casada con Pepe el hijo del sr. Paco el lechero; y alguien mas joven pero que creo me recordara que es Paquito de Jose Romay 2, su madre era vecina mia hasta que me marche a vivir fuera del barrio de la Iglesia,hoy vivo en Torrevieja cerquita dela playa.
Yo si recuerdo las cuevas que habia donde esta el campo Garcia de la Mata y a sus moradores, entre ellos recuerdo a un señor gitano que ejercia de sereno por cierto muy buena persona, pasaba los domingos por las casas y cada uno le daba lo que podia ,con eso y alguna chapucilla vivian todo la familia; tambien como cuando eramos crios ibamos a la sical y jugabamos con las vagonetas de los ladrillos lanzandolas por las vias hasta una plataforma enla que le dabamos la vuelta y de vez en cuando salia el guarda y a correr se ha dicho; las huertas que habia al otro lado del arroyo ( hoy M 30 ) como la de gines donde habia unos higos deliciosos entre otras muchas cosas.
Bienvenido Pedro y muchas gracias por la información. Seguro que lo sabes, pero hay otro artículo más de la Quinta con más comentarios:
ResponderEliminarhttp://historias-matritenses.blogspot.com/2009/01/quinta-de-la-paloma-2-parte.html
e incluso un mapa donde vamos añadiendo los nombres de los vecinos.
Yo no soy de la Quinta, pero leo con interés vuestras aportación. Una pregunta: ¿Pepe el de Angel Muñoz era uno al que apodabamos el portavíones por tener la cabeza muy grande?
Saludos.
Hola a todos los de este blog. Yo no he vivido nunca en La Quinta, pero he tenido muy buenos amigos. Hemos montado en moto en el campo de Lasical, nos hemos fumado nuestros cigarros en el bajo de la pasarela y he estado en casa de algun amigo, que omito el nombre por si no le gusta.
ResponderEliminarEstuve en la exposicion de fotos que hizo la Iglesia y hay muchas mas fotos de las que se publican aquí. ¿Donde están esas fotos?.
Por ej. reconocí al padre de el rata ( Antonio ) y alguno más.
Si os pusierais todos de acuerdo los que vivis en las casitas hariais un buen album de lo que fue nuestro barrio antes y después.
Yo soy insignificante, pero tengo muchas anecdotas de muchos de los que vivisteis allí.
Hola Anónimo (la próxima vez por favor identificate, en los artículos de la Quinta todos lo hacen). Cualquier cosa que se publique en el blog tiene que ser hechas por nosotros, para lo que tu quieres hacer hay otros medios en Interner. Por supuesto que en la Exposición de la Iglesia había muchas fotos que no están aquí, pero ellos nada tienen que ver con este blog, de la misma forma que fotos que están aqui no las tenián en la exposición. El blog está abierto a todos, si quieres participar puedes hacerlo. Hasta ahora hemos publicado con mucho gusto todas las fotos que nos han enviado.
ResponderEliminarSaludos.
Hola a todos. Viví en la Quinta de la Paloma hasta los 17 años, después de la expropiación subimos a los pisos de la iglesia, vivía en la calle Vora 7, la que estaba pegada al barranco. Tengo cientos de recuerdos de mi infancia y adolescencia en el barrio. fui al colegio de los Patos, con don José como profesor. A mis hijos les cuento mis correrías por la Sical, las peleas de piedras contra los chicos de las torres de San Juan Bautista, las mojadas en el arroyo y la huerta del tio Gines. Muchos amigos se fueron a otros barrios de madid y otros subimos a los pisos. Pasamos muchas calamidades pero para mi fue la mejor infancia.
ResponderEliminarHola. Me llamo Carlos. Soy uno de esos chicos de las torres. Recuerdo aquellas batallas con piedras. También un terraplén que había en Treviana 5 en el que nos deslizbamos con cartones y que iba a parar a la Quinta. Un saludo a todos.
EliminarCon cartones y hasta con algun colchón, jeje
EliminarBienvenido Santiago. Ya sabes que tienes este sitio para lo que quieras. Aunque imagino que lo habrás visto, te pongo un link del último articuló de la Quinta:
ResponderEliminarhttp://historias-matritenses.blogspot.com/2010/11/la-quinta-de-la-paloma-el-barrio.html
Desde él puedes ver los otros del barrio.
Saludos.
hola me llamo jesus aunque me conocian como susi naci en la quinta 1962,estudie en san juan bautista y en los patos del san juan bautista no tengo buenos recuerdos,don jacinto don enrique, sin embargo de los patos siendo un centro mucho mas humilde tengo buenos recuerdos con don jose y los partidazos en el recreo,fui muy feliz en la quinta,el garcia la mata tenia un campo de futbol que no usaban,pero nosotros si,siempre con un ojo puesto al guarda,me acuerdo de la casa de los picos, la casa alta, la bandera y sobretodo mis hermanos mis primos y mis amigos y amigas siempre jugando en la calle.saludos a todas las generaciones que nos criamos en la quinta de la paloma
ResponderEliminarBienvenido Susi, tienes el blog para cuanto gustes.
ResponderEliminarSaludos.
Hola Jesus. He entrado por casualidad ya que normalmelte entro en la "tercera parte" para ver si hay nuevos comentarios del barrio(hay tres partes de esta pagina mas el plano de la Quinta). Yo soy del 62 y fui a los Patos con D. Jose hasta que cerraron y nos trasladaron a S.J.B., pero no te recuerdo. ¿Tu me recuerdas?¿Puedes darme mas datos de ti? Un saludos
ResponderEliminaros acordais del campo de futbol que hicimos con las porterias del garcia la mata
ResponderEliminarla madre de juan señor se llamaba antonia goya era su prima
ResponderEliminarHola Basilio soy Jesús,de momento no te recuerdo. Yo vivía en Estrecho De Bonifacio de los que ahora me acuerdo son Sandoval,mi vecino Miguelin,Toñín,su hermano Luisito,Pedro Gomez,Pedro Martín,Quino,Juan Señor,El Vela...y gracias a Ricardo voy recordando mas cosas del barrio.Primero estudié en San Juan Bautista y luego en Los Patos del 67 al 72 que me fuí al barrio de la alegria,seguro que coincidimos en Los patos por que solo habia una clase para todos los cursos.Tengo 4 hermanos pero con el que mas estaba es con mi hermano Domingo.
ResponderEliminarTambién me gustaría saludar a Justito ya que mi familia y la suya fueron buenos amigos.Mis padres eran Eduardo y Basi.Un saludo
Hola a todos, no se si os acordareis de mi, soy Chuchi hijo de Lola y Marino y hermano de Marino y Fernando. Vivíamos en la calle Timor número 8, encima de la mercería de la Sra. Rosario y el Sr. Gregorio. Me acuerdo mucho de Pedro y de su hermano Emilio, de Fede, de Fetito, Alfonso hijo de la zapatera, de Goyo Bermejo, de José Antonio el hijo del sereno, de Angustias, de Tomasin y su hermano Goyo, de Luis bobee y tantos mas. Sigo teniendo contacto on José Miguel, hermano de Marisa, q vivían al lado de la Taberna de Benito y eran familia de los carboneros. Que recuerdos!!!!
ResponderEliminarEncantado de que te des a conocer Chuchi. Seguro que los vecinos que entran aquí te conoceran y entre todos podreís recordar aquellas historias.
ResponderEliminarSaludos.
Felicidades por la página, es una maravilla. GRACIAS
ResponderEliminarHola "Chuchi":
ResponderEliminarA pesar de que yo también nací en el barrio de la Quinta de la Paloma, no nos conocemos (o eso creo), pero has citado algunas personas que sé quiénes son: Fetito, si mal no recuerdo, era un chico minusválido muy amigo de mi hermano Eduardo, también afectado de minusvalía, en concreto, la "polio", por desgracia una enfermedad muy común en la época. Fetito y mi hermano se llevaban muy bien, aunque de vez en cuando se insultaban aludiendo cada uno de ellos a su tara física, lo cual no dejaba de tener su gracia.
En cuanto a Tomasín y su hermano Goyo, me imagino que te estarás refiriendo a mis primos. Y ya que les menciono, te diré que su madre, mi tía Luisa, falleció hace un par de semanas, con 92 años. Algunos de los que en este blog han intervenido seguro que la recuerdan.
Nada más. Me tienes a tu disposición, porque aunque veas mi nombre en el post del barrio de Peñagrande-Lacoma (donde viví desde los seis años), yo nací en la Quinta de la Paloma y de ella conservo imborrables recuerdos.
Un saludo,
Juan Antonio Díaz
Hola Jesús,tú hermano Marino q.e.p.d.Era uno de los chicos de mi panda,por su altura siempre era el que mejor llegaba a las ramas de los árboles para poner las cuerdas de los columpios,era muy noble,fué uno de los chicos que nos enseñaron a las chicas defensa personal,siempre le llevare en mi recuerdo.
ResponderEliminarTú madre ,la Sra. Lola era la que nos curaba cuándo nos caíamos cerca de LASICAL,la otra curandera era mi madre al otro lado del barrio,no podíamos ir a otras casa porque no tenían un botiquin decente.
Me acuerdo mucho de tú madre y también de vosotros,un saludo de G.M.P.
Para Migueli,la casa pequeña era la peluquería de caballeros,la casa de dos pisos siempre la ví cerrada,no puedo decirte quién eran los dueños,la tapia destartalada corresponde a las viguetas de hierro que se montaban para la construcción en los barrios nuevos que se estaban realizando en aquella época.
ResponderEliminarSiento no poder darte más información,las únicas personas que conocí con ese apellido,no vivían ahí,si en la misma calle,pero no eran dueños de sus casas,estaban de alquiler,como casi todo el barrio.
Un saludo de G.M.P.
Gracias Gloria. Se te ha olvidado decirme en que calle está la casa, y la manzana o las dos calles perpendiculares que la corten.
ResponderEliminarGracias de nuevo.
Sobre el plano de la Quinta de la Paloma,estaba en el número 69 del plano que tan amablemente publicó Ricardo,espero que esto ayude a tus dudas,siento no poder aportar más,ya dije que esta casa siempre en mis recuerdos permaneció cerrada,la puerta de madera esteba pintada de un color azulón-grisáceo.
ResponderEliminarUn saludo de G.M.P.
A la vuelta de vacaciones veré si puedo encontrar algo más con estos datos. Hay cosas que habría que haberlas investigado hace 50 años, en fin.
ResponderEliminarGracias por todo Gloria.
De forma casual leo este bloq, vivi en las viviendas de la Fabrica Lasical desde el año 52 al 71, fui alumno del Colegio Los Patos, con un excepcional profesor D. José Egea Lopez, que formo una pequeña rondalla con instrumentos, que compro y que fueron pagando nuestros padres(tarde y mal), mis recuerdos de los sitios y personas que se mencionan, se van incrementado con la lectura de vuestros comentarios..... y me.......
ResponderEliminarNo se si este bloq esta ya cerrado, pero volveré a visitarlo
Hola Juan, bienvenido. No, el blog no está cerrado, lo que pasa que los vecinos dejan de comentar, pero lo siguen viendo y hay vecinos que son lectores asiduos. Hay bastantes más artículos de la Quinta por si te interesa.
ResponderEliminarUn saludo
Buenos días Juan Soy la hija de Jose Egea Lopez maestro en la escuela publica Los Patos situada en la quinta de la Paloma
ResponderEliminarRecientemente ha llegado hasta mi que fuiste alumno suyo, y que todos juntos formasteis una pequeña rondalla
Me ha emocionado la referencia que haces de mi padre fue un ser excepcional
Con el tiempo el formo su propia orquesta compuesta por sus 8 hijos siempre fue muy amante de la música y ese amor nos lo transmitió desde bien pequeños y algunos de nosotros nos hemos dedicado profesionalmente a este arte estando en diversas orquestas de Madrid
Hola muy buenas aver quien se acuerda de jacobo y su familia o del diego.y su familia o del mena y su familia ambos eran tres ermanos que gunto con su madre bebían en el barrio el diego bibIa en la calle estrecho bonifacio en frente de la señora dioni y el señor baldomero lo digo porque yo soy hijo del diego y de Maria Jesús y pase parte de mi niñez paseando con mi bicicleta por sus calles y eso ya noay quien me lo quite iva al colegio los patos tenia un amigo que se llamaba abre ojos y otro qe eran ermanos llamados los yuberos cogia mi merienda en una panadería qe Avia en el parque san juan bautista y en fin qe echo de menos ese tiempo
ResponderEliminarHola soy Ana serrano .Yo viví en la quinta de la paloma.calle José romay n°8.era vecina de Pedro agulera su madre Paca.su hermana Mari Carmen.comi muchas vecesen su casa su madre Paca era una gran mujer.me puso más de una inyección .q recuerdos.!!
ResponderEliminarSaludos a todos los de la quinta!!
Me ha encantado encontrar este blog
Gracias, Ana, por la inserción de tu primer comentario en este blog de nuestro querido barrio Quinta de la Paloma al que muchos, en mayor o menor medida, pertenecimos. Es curioso que te apellides Serrano. Mi madre se apellida -todavía, pese a sus casi 92 años- Gutiérrez Serrano. Evidentemente no lo digo, porque además no me consta, que podamos ser familia, pero llama la atención que un apellido como ese, común, pero no tanto como otros, coincida en personas que vivieron muy cerca unas de otras (nosotros en la calle de los Tres Ochos) sin que exista entre ellas ningún parentesco.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Y la Quinta de la Paloma sigue en mi Corazón. Sí,vamos quedando pocos testigos de aquel Barrio. Llevo unos días muy pasivo después de proponer con toda mi fuerza que hagamos un libro en papel sobre este barrio ya desaparecido, cuyos habitantes en su inmensa mayoría también han desaparecido. El libro que yo haría sería un libro para muchas personas, como con algunas con las que les cuento que yo viví en ese barrio y no tienen ni idea de que exitió, pero que les interesa la historia de Madrid y de sus gentes, a veces mucho más que a los descendientes de los que allí vivieron.
ResponderEliminarYa sé que una cosa es proponer, y que no es tan fácil, pero Nono me ha puesto un WhatsApp animándome. Así que vamos a seguir dando "quehacer=la paliza" a Ricardo.
Pero, sea como sea, se hace camino al andar. Por ello, Ricardo te propongo que abras una cuarta parte de la Quinta de la Paloma, si es posible. Pues esa remisión de la tercera parte a la primera en rojo,parece un semáforo en rojo que nos cohíbe. Gracias Nono, gracias Ricardo. Un saludo afectuoso para todos los Quinteros
¡Qué gusto volver a tener noticias tuyas, Mario! Sin ti, la entrada de la Quinta de la Paloma estaría coja, tus testimonios son fundamentales para saber y entender cómo fue aquel barrio de nuestros amores. Cada vez que escribes siento una profunda alegría, ya lo sabes. Como también sabes que tu propuesta de libro, sea en papel o en digital, es una magnífica idea, y para que no haya dudas, declaro aquí mi total adhesión y colaboración para que de una u otra forma salga adelante. Y estoy seguro de que Ricardo tomará buena nota de tu petición y se sumará, dentro de sus posibilidades y tiempo, a las iniciativas que puedan surgir.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.
No exageres Nono, aquí el importante es Ricardo, pues gracias a él hemos podido contactar y traer a la memoria tantas vivencias, algunas de las cuales habían permanecido en hibernación hasta que la calidez de personas como tú las hicieron despertar.
ResponderEliminarEsa Cuarta Parte que propongo sería a modo de ensayo general, cuyo norte o fin podría ser la publicación del libro en papel.
Podíamos ir haciendo los grandes apartados a modo de índice.
No hace falta que empecemos ahora con un orden cronológico. Ya mandaré algo al respecto.
Por otra parte propongo una lista de suscriptores, cuyos nombres aparecerían al final del libro y que antes de imprimir tendrían que abonar el importe de su ejemplar. Además de ser muy bonito que aparezca el nombre de cada uno, nos ayudaría a llevarlo adelante. Bueno, ya me diréis. Un abrazo. Mario
Hola Mario y Nono. Que más quisiera yo que tener tiempo para este bonito proyecto. Actualmente el trabajo no me permite ocuparme de lo que me gustaría, por lo que no puedo decir adelante. Si en el futuro tuviera tiempo podríamos ver el tema con más profundidad.
ResponderEliminarUn abrazo
Aquí estoy de nuevo. No te preocupes Ricardo. No obstante, si te parece, querría enviar algunos recortes de prensa y alguna documentación gráfica sobre la Quinta de la Paloma y el Ventorro, La Sical... Y como me gusta decir a mis amigos, seguiremos hablando de los viejos y nuevos proyectos.
ResponderEliminarY a Nono, el nieto de la Señora Antonia, el gran Animador de la Quinta, mis más cordiales saludos. Para todos sin excepción un abrazo. MARIO
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Nueva foto añadida de la familía Díaz, aportada por Nono.
ResponderEliminarEfectivamente Nono,es la entrada de la casa de tu abuela Sra.Antonia,yo la recuerdo después de enfoscados los bajos.
ResponderEliminarUn saludo para todos de G.M.P
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuchas gracias, Gloria, aunque la duda que tengo no se refiere tanto al lugar donde se hizo la foto, sino el poder identificar a las personas que aparecen en ella. En concreto hay dos que de momento no he podido reconocer. Una de ellas es la persona que está a la izquierda de mi abuela y la otra el tercer hombre del sombrero negro que está sentado a la derecha de la foto con un niño (mi primo Manolo) a su lado. A los demás integrantes los tengo identificados, tal y como sostengo en el pie de dicha foto.
ResponderEliminarSería sensacional que tú o cualquiera de las personas que nos leen pudiera despejar las dudas.
Un cordial saludo.
No te puedo dar respuesta,en ese año yo tenía 3 años y a tanto no llego,si te puedo decir que las casas en que vivíamos de alquiler,eran 4 todas correspondientes al numero 5 eran propiedad de un piloto republicano que tuvo que huir a la Argentina.
ResponderEliminarLos alquileres los cobraba su hermano todos los meses,su apellido era Fraile,pero no sé su nombre.
Un saludo para todos de G.M.P
De nuevo, muchas gracias, Gloria, por esa información sobre el propietario de las casas del número 5 correspondientes a la calle de Los Tres Ochos, donde entre otros, vivía mi abuela. Me resulta interesante saber que fueran propiedad de un piloto republicano apellidado Fraile.
ResponderEliminarUn saludo.
En la lista de expropiaciones de 1973 figura en el número 5 de la calle de los Tres Ochos, Francisco Fraile, con domicilio en la calle Ribera del Manzanares, 33. También está el número 5 bis, y como propietaria Josefina Calvano, en domicilio desconocido.
ResponderEliminarEn 1953, la escuela de la Quinta era nombrada así:
ResponderEliminar"Sección Quinta de la Paloma. —Escuela de Suburbios de la calle de los
Patos."
La Sra.Josefina en ese tiempo ya habia fallecido,sus hijos Pepe y Carmen,el era carpintero de maquetas en la C.E.A y ella se fué a trabajar con su marido y sus hijos a Suiza,ese barrio guarda muchas historias d todo tipo,pero como ya dije no lo podemos convertir en una novela.
ResponderEliminarEl colegio le fundaron durante la República,cuando yo tenía 12 años y la maestra se declaró incompetente para enseñarme más me dio permiso para coger libros de unas cajas en el sótano,aquellas cajas no fueron abiertas hasta que lo hice yo,los libros eran magníficos y aprendí un montón con ellos,lo que me extraño fue que no los hubieran aprovechado antes.
Un saludo para todos d G.M.P
¡Fantástico, Ricardo! ¡Eres un lince! Muchísimas gracias por esa información sobre el apellido del propietario de la casa número 5 de la calle de Los Tres ochos, que confirma lo que adelantó Gloria. Muy interesante saber que también hubo una 5 bis y facilitar a su vez el nombre de la propietaria.
ResponderEliminarUn saludo para todos.
FRANCISCO fRAILE,era el hermano del piloto,el que venía a cobrarnos los recibos,ya he dicho no saber el nombre del hermano,un saludo para todos de G.M.P
ResponderEliminarBuenas tardes a todos:
ResponderEliminarEl nombre del propietario, de las casitas del número 5 de la calle de los Tres Ochos según figuraba en el registro de la propiedad, era exactamente Francisco Fraile Gallego. Venía él mismo a cobrar en una singular bicicleta, que creo recordar tenía las llantas de madera. Lo del hermano no tenía noticia. También recuerdo que era un hombre bastante delgado y afable. Saludos. MARIO
Quiero deciros que casi todos los días miro qué hay de nuevo de nuestro barrio y me gusta ver que seguís escribiendo y contando cosas.
ResponderEliminarHoy quería deciros que siempre me ha atraído la historia del barrio. Y encontré hace años esta noticia, publicada en La Voz, el 15 de agosto de 1935, que como ahora no lo puedo reproducir lo pongo entre comillas:
“FÚTBOL EN LA QUINTA DE LA PALOMA---Esta Quinta de la Paloma es un madrileñísimo barrio del extrarradio, en el cual (en el barrio) domina triunfador el deporte. Hoy es la fiesta principal de aquella zona, a la que seguirán otras mañana, el sábado y el domingo. Entre las de este día figura un partido de fútbol, anunciado para las cinco de la tarde, en el que se disputarán una artística copa los equipos del Hogar de la Prosperidad y la Gimnástica de la Paloma. Arbitrará el colegiado Sr. Peteira. Oportunamente daremos cuenta del resultado de este acontecimiento balompédico.
Entre el elemento joven de la Quinta de la Paloma, y entre otros que ya están maduros, reina gran entusiasmo. Y las localidades están a punto de agotarse, a pesar de los elevados precios.”
¿Ricardo sabes algo de la Gimnástica de la Paloma? Gracias a todo el equipo de “Historias Matritenses”. Y a todos los quinteros mis más cariñosos saludos. MARIO
Hola Mario. De la Gimnástica tengo poco datos. Se menciona en la prensa desde 1933, y tenía primer equipo, segundo equipo y equipo infantil. Es calificada como "Categoría de los Modestos", no oficial. Jugaba con equipos muy cercanos (ahora os cuento), pero lo que más me llama la atención es que tenía campo propio. Entiendo que debía de ser entre La Quinta e Ibarrondo, allí si jugué yo alguna vez, aunque no era un campo en toda regla. Ahora viene lo más bueno. Como decía jugaban con equipos muy cercanos: "Balompédica de Canillas", Barbieri, "Colonia Deportiva", "Unión Deportiva Carmen", y lo que me llama la atención: C.D. Bandera y "Peña Sotero".. ¿Os suena?. Puedo aportar los nombres de los jugadores del Bandera y el Sotero por si os suena. Bandera: Rueda, Pancho, Garrido, Ruiz, Merino, José, Osa I, Dionisio, Ferrán, Prieto y Osa II. Peña Sotero: Manolo, Romay, Lorenzo, Campos, Tololo, Verín, Lalo, Abad, Picorelle, Lucio y Félix. Tanto el Sotero como el Bandera ganaron por muchos goles a la Gimnástica. Romay creo que también jugaba con la Balompédica Canillas.
ResponderEliminar¡Qué buenas, Mario y Ricardo, vuestras «crónicas futbolísticas»! Me encanta saber que en la Quinta hubiese tanta afición por el fútbol. Obviamente, al tratarse de los años treinta, ni por asomo cabría esperar que en esas alineaciones hubiese alguien de mi familia. Mi padre jugó al fútbol, pero tal y como ya escribí en alguna ocasión, lo hizo en el San Pascual y por la información que tengo, debió ser en la segunda mitad de los años cuarenta, que es cuando él tenía veintipocos años. En cuanto a los nombres que Ricardo cita en las alineaciones de los equipos C.D. Bandera y Peña Sotero (lugares emblemáticos del barrio) el único que me resulta conocido es Romay, que supongo tendrá algo que ver con el Enrique Romay que vivía (creo) en Estrecho de Bonifacio y al que muchas veces se le ha citado por aquí.
ResponderEliminarEn cuanto al nombre del propietario de las casas del número 5 de la calle Tres Ochos, gracias, Mario, por precisar aún más su figura y a Gloria, decirle que no hacía falta que reiterara no saber el nombre del hermano del cobrador. Lo habíamos entendido a la primera.
Un abrazo a todos los quinteros seguidores de este maravilloso artículo.
Buenas noches,Ricardo:
ResponderEliminarAqui estoy de nuevo, que como sabes he estado "recordando la mili". Y leyendo el magnífico artículo de Ernesto Fernández Agudo que escribe en Historias Matritenses bajo el título "Instituto Cardenal Cisneros", donde yo también estudié,aunque nocturno.
Pero hablemos de la Quinta. En el Periódico ªLa Nación", con fecha de 20 de agosto de 1927, encontré hace un tiempo la siguiente noticia refiriéndose a Lasical, de la que pongo entre comillas las primeras líneas:
"Un obrero alcanzado por una máquina sufre heridas gravísimas."
"En la Quinta de la Paloma, sita en el Ventorro del Chaleco, existe una fábrica de ladrillos en la que funciona una potente máquina. El operario, Pablo García de la Peña, de veinticuatro años, y vecino de aquella barriada, se aproximó a dicha máquina para examinar el estado de los cojinetes, siendo alcanzado por la rueda del volante..." Un saludo a todos los quiteros. MARIO
Hola Mario. Muchas gracias por el comentario. Si que tenía ya localizada la noticia. Debía de ser una condiciones muy duras en los que trabajaban los obreros de Lasical. Creo que el gran barranco que estaba desde la fábrica hacía la Ciudad Lineal fue hecho por los operarios que debían de utilizar aquellas tierras para fabricar ladrillos. Recuerdo que había un gran pozo en la Cuesta de Queremón, a medio camino entre la parte de abajo y la iglesia. Cuando eramos pequeños tenía una pared de ladrillo que le rodeaba y como había un agujero mis amigos se metían por él. A mi siempre me dio mucho miedo entrar en aquel lugar oscuro, más teniendo en cuenta que la siguiente pared era el pozo profundo.
ResponderEliminarUn abrazo
Buenas noches, Ricardo:
ResponderEliminarEstoy curioseando las viejas Guías y Almanaques matritenses de finales del siglo XIX y principios del XX, y especialmente el callejero. Y en “Guía Alfabética de las calles y plazas de Madrid”, del “Calendario Madrileño de 1882”. Pues bien, debajo de la columna “calle” aparece como tal Abroñigal (arroyo), que dice que tiene la entrada por “Primer molino” y la salida por “Camino de Vicálvaro”. No sé situarla. ¿Dónde estaba ese molino? ¿A qué distancia estaba de la Quinta de la Paloma? Seguro que me puedes decir algo. Como siempre un cordial saludo para todos. MARIO
Hola Mario. Muy buenos los datos que nos aportas. Sin tener ahora mismo la posibilidad de consultar algún plano te cuento lo que creo. En primer lugar habría que saber si el callejero hace referencia solo a nombres del Municipio de Madrid, o recoge también lo de los pueblos colindantes, como Canillas y Vicálvaro. Te digo esto pues la calle o camino del Abroñigal estaba en las Ventas, en lo que era entonces Canillas, en la actual M30. Este lugar siempre fue un motivo de discusión entre los municipios de Madrid y Canillas pues no estaba claro el límite de cada pueblo. Del molino no sé nada, pero se me ocurre que quizás tuviera que ver con uno de los salto de agua del Canalillo. Había uno en Francisco Silvela, hacía Manuel Becerra, y quizás allí había un molino (que para eso eran los saltos), y puede que desde allí hubiera algún camino o calle llamada Abroñigal y que fuera al arroyo. Lo que si es seguro que los dos caminos de Vicálvaro estaban en Moratalaz, el nuevo y el viejo, y la carretera es la actual avenida de Daroca, lo que siempre hemos conocido nosotros como la carretera del Este. Por tanto solo nos falta saber de que se trata ese molino.....
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola de nuevo Mario. He ojeado los planos y no he encontrado nada concluyente. Solo en el de Facundo Cañada de 1900 aparece el Paseo del Molino, que nacía en el Paseo de las Delicias e iba a morir en el el Arroyo Abroñigal junto a su unión con el Manzanares. No se si la guía que tienes tu se referirá a esto.
ResponderEliminarUn abrazo
Estimado Ricardo:
ResponderEliminarGracias por tu inmediata acción para averiguar más sobre este Abroñigal (arroyo) que viene en los viejos callejeros de “Madrid capital“. Estoy seguro que sigues investigado sobre este tema. Lo que me ha motivado para seguir buscando yo también más información. He encontrado algo al respecto que te lo mandaré a ver que opinas.
Un abrazo. MARIO
Buenas noches Ricardo:
ResponderEliminarYa no hay calle Abroñigal, ni arroyo Abroñigal, ni Quinta de la Paloma, ni Calle de los Tres Ochos, todo ha sido barrido.
Por eso, Ricardo, ya conoces mis “desvaríos”, permíteme que mientras preparo lo relativo a la Calle Arroyo Abroñigal que te comenté, bajo mi única responsabilidad, pida:
A quien corresponda, que recuperemos esos nombres, que ese tramo de la M30, que asfaltó el Arroyo, se llame únicamente Avenida del Arroyo Abroñigal, pues es un nombre tan cargado de historia para Madrid, que no puede quedar tan solo para un pequeño grupo de “madrileños” y estudiosos. Y también recuperar la Calle de los Tres Ochos, por su significado, hoy asumido por todos, que forma parte de la Historia y en homenaje a tantas gentes trabajadoraras de aquel Madrid de la Quinta de la Paloma.
Estas noches de calor, ya sabes, me viene a las mientes esa frase de “lo consiguió porque no sabía que era imposible”. Un abrazo y saludos para todos. MARIO
Hola Mario. He encontrado la calle Arroyo Abroñigal en un callejero de Almax del año 1955 aproximadamente. Iba desde desde el puente de Ventas hasta justó el barrio de La Bomba, no era muy largo, y discurría justamente por la actual M30.
ResponderEliminarUn saludo
Hola, Ricardo:
ResponderEliminarA continuación te envío lo prometido:
En “Almanaque Guía Matritense para 1909” en su callejero de “Madrid capital”, comienzo a leer por orden alfabético: Calle Abada, Abades, Abanico, Abascal, ABROÑIGAL (arroyo). Hay que decir que el callejero para cada calle tiene ocho columnas, que de izquierda a derecha son: (1) CALLE Y ZONA / (2) ENTRADA / (3) SALIDA /(4) CALLE / (5) NÚMEROS /(6) DISTRITO / (7) BARRIO / (8) PARROQUIA. Pues bien en la (1) Abroñigal tiene siete aparatados: Abroñigal a, b, c, d, e, f, y Abroñigal g. Y que son los siguientes:
ABROÑIGAL a) tiene entrada: Límite Chamartín; salida: Camino Viejo de Vicálvaro; calle: Abroñigal; números: a; distrito: Buenavista; barrio: Prosperidad; parroquia: Pilar.
ABROÑIGAL b): entrada: Camino Viejo de Canillas; salida: Puente del Espíritu Santo; calle: Abroñigal: números: b; distrito: Buenavista; barrio: Guindalera; parroquia: Pilar.
ABROÑIGAL c): entrada: Puente del Espíritu Santo; salida: Camino Bajo de Vicálvaro; calle: Abroñigal; números: c; distrito: Congreso; barrio: Plaza de Toros; parroquia: Pilar.
ABROÑIGAL d): entrada: Camino Bajo de Vicálvaro; salida: Puente de Vallecas; calle: Abroñigal, números: d; distrito: Congreso; barrio: Guttenberg; parroquia: Angustias.
ABROÑIGAL e): entrada: Puente de Vallecas; salida: Camino de los Yeseros; números: e; distrito: Hospital; barrio: Pacífico; parroquia: Angustias.
ABROÑIGAL f): entrada: Camino de los Yeseros; salida: Camino de los Molinos; calle: Abroñigal; números: f; distrito: Hospital; barrio: Delicias; parroquia: Angustias.
ABROÑIGAL g): entrada: Camino de los Molinos; salida: Río Manzanares; calle: Abroñigal; números: g; distrito: Inclusa; barrio: Gasómetro, parroquia; Purísima Concepción.
La Guía tiene un plano interesante, pero donde como casi todos, no viene reflejado o yo no lo veo este Abroñigal del Callejero. Pero si quieres otro día te lo mando. Ya me dirás. Un abrazo y saludos. MARIO
Mil gracias Mario por tu comentario. Entiendo que La Quinta estaba en el primer tramo mencionado. Sin embargo tengo la impresión que más que "a la calle", se refiere "al arroyo". Tengo un plano muy detallado de 1906 en el que vienen todas la calles con mucho detalle. Miraré haber si dice algo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mario, en el plano de 1906 viene bastante bien detallado, y el tramo desde el puente de Ventas hasta más o menos la bomba viene como arroyo Abroñigal, pero no como calle. Desde allí hasta pasado la Quinta, a la altura de López de Hoyos viene como calle Pignatelli. Desconozco si era una calle, aunque creo que se debía de tratar de un simple camino.
ResponderEliminarUn abrazo.
Estimado Ricardo:
ResponderEliminarGracias por tu información, siempre tan interesante. Ya comentaré algunas cosas que he encontrado relativas al Abroñigal.
Pero hoy quiero contar que nací en la calle California, en el pequeño comercio-vivienda de Cacharrería de mi abuela, calle a la que se entraba por la calle Seco, junto al famoso Cafeto, desde la avenida Ciudad de Barcelona, barrio fronterizo con el Puente Vallecas, a la parte de acá del arroyo, junto a las vías del tren, y que para ir al médico teníamos que cruzar el Arroyo por un puentecito o paso que salvaba un pequeñísimo cauce seco y que a la derecha se veía a unos 500 metros el Puente de los Tres Ojos por donde pasaba el ferrocarril. Es decir, casi al final del Abroñigal, y con cuatro años me fui a vivir a la otra punta del Arroyo, a la Quinta de la Paloma. En alguna ocasión siendo muy niño fui con mis padres a casa de mi abuela andando por todo ese paso, arroyo, camino… y mi padre que era muy andarín, “a la fuerza ahorcan”, hizo este itinerario en varias ocasiones. Estaba entrenado, pues desde la Quinta de la Paloma durante muchos años iba andando en invierno y en verano a trabajar a la imprenta de Aldus en la calle Castelló en la que entraba a las 7 de la mañana y volvía casa ya de noche. De ahí mis nostalgias y el querer saber de este Abroñigal que como sabes, ya aparece mencionado en 1202 en el Fuero de Madrid. Un abrazo. MARIO
Buenas noches, Ricardo:
ResponderEliminarLos que tenemos ya cierta edad nos sorprende, nos maravilla cómo aquel Madrid de los años cincuenta y sesenta ha cambiado, tanto la ciudad como sus afueras, con sus campos de trigo, caminos, fuentes, sus cuestas, cerros, arroyos, regatos, sus huertas, albercas, canalillos, vaquerías, norias, amapolas, grillos, etc., etc. Este paisaje, esta fotografía solo está en nuestro recuerdo, como los entonces pueblos aledaños, primero anexionados y luego fagocitados por urbanizaciones y carreteras.
El Cerro de la Cabaña, la Quinta de la Paloma, el Ventorro, la Ciudad Lineal (con su tranvía). Y el arroyo Abroñigal, otrora, antes que lo sangraran con los “viajes”, lugar tal vez de “aguas frescas y cristalinas” (¡Dios sabe cuándo!). Pero el que yo conocí, desde el Ventorro al Puente de los Tres Ojos, era ya un seco lecho en verano y un barrizal en su mayor parte cuando llovía.
Arroyo, de nombre, pero lugar de paso y comunicación de barrios humildes, “terreno de nadie”, en cuyos márgenes había huertas, pero regadas con agua del canalillo y con alguna noria, que no recuerdo exactamente su ubicación, pero que estaba entre el puente Calero y Ventas.
Un día descubrí que bajo el que fue lecho del arroyo Abroñigal, a la parte de allá del Puente Calero, había un pozo de dos o tres metros de profundidad por el que se accedía a un gran túnel de hormigón, o galería, donde bajaba una gran cantidad de aguas fecales y otros detritus. Alcantarillado (improviso), construido hacia 1916. Un abrazo y saludos para mis vecinos y vecinas de la Quinta. MARIO
Buenos días, Ricardo:
ResponderEliminarPor mi oficio, siempre entre libros, y haber vivido en la Quinta de la Paloma, sumado a mi nostalgia y curiosidad. Lasical,importante fábrica de ladrillo sílico-calcáreo, situada para mí en la Quinta de la Paloma, veo en sus magníficos anuncios en color aparecidos en revistas de Arquitectura y Construcción de los años treinta: "Oficinas: Pi y Maragall, 7. Fábrica: Ventorro del Chaleco (Prosperidad). Claro que sobre todo lo de Prosperidad era orientarivo y lo de Ventorro, era así, pero también lo de la Quinta de la Paloma. De todas formas para el que no lo sepa y un día lea las dos distintas ubicaciones, aunque son limítrofes, quizá se pregunte: ¿Quién es el que está en lo cierto? O no se pregunte nada y opte, con buena volutad, por situarla en Prosperidad, y otro que le copie lo sitúe también en la Prosperidad y entre paréntesis ponga, con la mejor intención (La Guindalera) con el ánimo de dar más información. Pues bien, algo parecido leo de vez en cuando en algunos escritos sobre Madrid. Un abrazo.
Efectivamente Mario, Lasical estaba en La Quinta de la Paloma, pueblo de Canillas, mientras que el Ventorro era en su mayor parte de Madrid. Imagino que sería más fácil localizar el Ventorro en aquellos días, camino de Hortaleza. Además la fábrica no estaba muy lejos y la gran chimenea era visible en kilómetros.
ResponderEliminarNo sé si has visto este artículo donde hablamos de Lasical.
http://historias-matritenses.blogspot.com.es/2009/04/barrio-de-san-juan-bautista-toma.html
Un abrazo
Ricardo
Gracias, Ricardo:
ResponderEliminarMi intención, con estas palabras de la ubicación de Lasical, es sobre todo el cuidado que hay que tener a la hora de escribir, pues hay noticias que se van deformando hasta lo absurdo a partir de la interpretación de alguna información que alguien trata de aclarar o matizar sin darse cuenta de su error. Un abrazo. MARIO.
La Navidad, cuando éramos niños, entre una y otra parecía que habían pasado varios años, y ahora sin embargo, ya mayores, nos parece que hace solo unos meses que fue la anterior. Recuerdo a mi padre cantarme un villancico, a modo de nana, que durante años ha permanecido en lo más profundo de mi memoria: "Madre en la puerta hay un niño más hermoso que el sol bello y dice que tiene frío, pues dile que entre, se calentará porque en esta tierra ya no hay caridad, ya no hay caridad..., etc. Y el fin de año, mi madre tocaba las doce campanadas dando con un cucharón en la trasera de un barreño grande. Sería el año 1951. Feliz Navidad queridos vecinos de la Quinta, y a sus hijos y nietos. Y a Nono y a Gloria. Y a Ricardo y a José Manuel. Un abrazo. MARIO
ResponderEliminarGracias Mario por este comentario tan entrañable. Feliz Navidad para ti y todos los tuyos.
ResponderEliminarUn abrazo
Buenos días a todos. Hacía tiempo que no escribía, aunque también es cierto que sigo con puntual regularidad todo lo que se publica. Y vuelvo a escribir con la tristeza de comunicar que mi primo Basilio falleció anteayer víctima de esa cruel enfermedad a la que no hace falta darle mayor publicidad.
ResponderEliminarLo hago como homenaje, pues mi primo Basilio, hijo de mi tío Basilio (q.e.p.d.), vivió en la Quinta hasta que las piquetas derribaron las últimas casas del barrio. También porque durante un tiempo mi primo escribió en estas entradas dedicadas a la Quinta de la Paloma y envió fotografías de nuestra familia y en alguna de las cuales se le puede ver a él. Creo recordar incluso que tuvo amigos con los que intercambió recuerdos a través de este blog.
Por ellos y porque mi primo Basilio (Basi) aunque llevaba viviendo treinta y tantos años en Chiva (Valencia) siempre fue y se consideró madrileño y «quintero», quiero dedicarle estas líneas. D.E.P.
Lo siento mucho Nono. Es una pena, tu primo siempre ayudó en el blog y se notaba su inmenso cariño por el barrio.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo para ti y toda tu familia.
Muchas gracias, Ricardo. Lo malo es que desaparecen los barrios y desaparecen también sus pobladores y esto sí que es triste, porque sin ellos ¿quién va a contar o recordar cómo, dónde y quiénes fueron los que allí habitaron? Hoy me da por el pesimismo. Dentro de equis años cuando no quede/quedemos ninguno, ¿quién se va a acordar del barrio de la Quinta de la Paloma? Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarQuerido amigo Nono. Nuestros hogares, en mayúsculas, fueron donde nos criamos. Como bien sabes yo no soy de La Quinta, pero todo este blog lo hice pensando en mis padres y abuelos. He imaginado mil veces como vivieron ellos en nuestros barrios, que problemas debieron de sortear, he intentado verlo con su mirada. De La Quinta que decirte, Gloria, Paquita, Mario, tu primo,... cuanto cariño derramado aquí. Por mi parte solo deseo que todos estos recuerdos que se han escrito en el blog nunca se borren, que en el futuro alguien los pueda consultar y hacer una historia lo más real y humana posible, que para eso sirva este blog.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo amigo, de corazón a corazón.
De nuevo, muchas gracias, Ricardo, por tus palabras. Cuando descubrí -casualmente- este blog, jamás me imaginé que me iba a deparar tantos y tan buenos recuerdos de mi lugar de nacimiento, mi querido barrio de La Quinta de la Paloma en el que pasé los primeros seis años de mi vida. Nunca agradeceré lo bastante a ti y a tus compañeros todo lo que ha significado para mí revivir la historia del barrio a través de los escritos de todos los vecinos que se han ido asomando por aquí. De manera muy especial quiero referirme a Mario, a quien se me pasó responder en su cariñoso último mensaje del 23 de diciembre. Él es la historia viva, el mejor testimonio de lo que representó La Quinta para todos nosotros. Le envío un fuerte abrazo y a ti también, por supuesto.
ResponderEliminarNuestras vidas son los ríos / que van a dar en la mar, / que es el morir: / allí van los ríos caudales, / allí los otros medianos / y más chicos; / y llegados, son iguales / los que viven por sus manos y los ricos. BASILIO no te olvidamos porque estás en el mar de nuestros recuerdos. Te recuerdo joven, sonriente, subiendo o bajando por la empinada cuesta de nuestra calle de los Tres Ochos. Te recuerdo junto a tu hermano Eduardo, cuando ibais o volvíais de la obra. Un día oí decir a un señor que hablaba con vuestra madre, la señora Antonia, la abuela de Nono, que erais dos buenos “arbañiles”. Erais lo más castizo de la calle, joviales, alegres. Un abrazo Nono. MARIO
ResponderEliminarAmigo Nono, cómo pasa el tiempo. Me refería a Basilio padre, que es al que conocí. Un abrazo para ti y para Ricardo. Os prometo escribir unas palabras dedicadas a vosotros especialmente. Mario
ResponderEliminarMuchas gracias, Mario, por esas líneas tan entrañables que dedicas a mi abuela Antonia, mi tío Basilio y mi padre Eduardo, como bien dices, «los más castizos, joviales y alegres de la calle Tres Ochos» del siempre recordado barrio de la Quinta de la Paloma. Así es como fueron, así es como los recuerdo y así es como quiero seguir recordándolos. Un fuerte abrazo, amigo Mario.
ResponderEliminarHa muerto Marcela, la madre de Nono. Digna de figurar en el santoral de mujeres que habitaron en la calle de los Tres Ochos. Vuestro nombre no pasará a la historia, aunque con vuestro trabajo y el de vuestros maridos, fuisteis los que más hicisteis para traer la España más “rica”. Que hoy os niega el pan y la sal. Dicen que es la Ley. No olvidemos que ley y justicia no es lo mismo. Marcela, para mí, para muchos seguirás viva en nuestro recuerdo. Descansa en Paz. Un abrazo a tus familiares y amigos. MARIO
ResponderEliminarGracias es la palabra que más he repetido en los últimos días. En concreto desde que mi madre nos dejó este pasado sábado. Gracias, Mario, por esas palabras que le dedicas a Marcela, mi madre. Unas palabras tan llenas de sentimiento como de razón. A mi madre, a tu madre, a todas las madres de esa generación, deberían dedicarles un monumento porque hicieron mucho sin recibir nada, sin esperar nada a cambio, porque todo lo que hicieron lo hicieron por amor. Está claro que sus nombres no pasarán a la historia de España, no importa. Me basta con que pasen a la historia de cada uno de nosotros. Mi madre está ya en mi historia y en la de cada uno de los miembros de mi familia, su familia. Así será mientras vivamos. Un fuerte abrazo y repito: ¡GRACIAS!
ResponderEliminarAmigo Nono: La muerte de tu madre, Marcela, me trae a la memoria a todas esas madres de nuestra calle de los Tres Ochos: Remedios, la mía, Luisa, Antonia, Amelia y tantas mujeres de esta calle, que como ya he dicho están en mi Santoral. Me acuerdo de la sonrisa o gesto cariñoso que yo percibía con seis o siete años, o que quizá yo imploraba, de todas ellas. Marcela, tu sonrisa la llevo en mi corazón. Erais madres que nunca os quejabais de nada. Tengo que recordar que no teníamos agua en nuestras humildes casitas, ni retrete, ni calefacción, ni ropa de abrigo… Calle de los Tres Ochos, Quinta de la Paloma, no puedo expresar con palabras la emoción que siento al recordar a todas estas madres y abuelas que de alguna manera me cuidaron. Marcela sigues viva en mi memoria y en mi corazón. Un abrazo para todos. Gracias Ricardo, gracias José Manuel por darnos este espacio. MARIO
ResponderEliminarBuenas noches a todos los que todavía miráis de vez en cuando a ver si alguien escribe sobre nuestro barrio.
ResponderEliminarCreo que todavía podemos contar cosas.
Es importante nuestro testimonio de la vida cotidiana.
Pero también la participación de personas, como los nietos o familiares que oyeron contar con nostalgia algo sobre el barrio, aunque ellos no llegaran a conocerlo. Un abrazo. Mario
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ResponderEliminarHola, Mario. Disculpa que haya tardado tanto tiempo en saludarte y agradecerte tus últimas letras. Tienes toda la razón, «todavía pueden contar cosas los nietos o familiares que oyeron contar algo sobre el barrio». Es cierto, pero me da la impresión de que o ya son/somos muy pocos los que podrían hacerlo o ya han/hemos contado todo lo que podíamos contar. Quiero creer que es más por lo primero, pero en cualquier caso es triste. Una cosa es que el barrio desapareciera y otra muy distinta que, como el Coronel de García Márquez no tenga nadie que le escriba. Por mi parte aquí seguiré mientras haya alguien que de vez en cuando nos agite los recuerdos, por mínimos y lejanos que estos sean. Un abrazo, amigo.
ResponderEliminarHola, Carlos. Bienvenido y muchas gracias por aportar tu granito de arena a los recuerdos de la Quinta. Un saludo cordial.
ResponderEliminarHola Carlos. Además de darte la bienvenida, recordarte que tienes en el blog una entrada para el parque
ResponderEliminarhttp://historias-matritenses.blogspot.com/2011/09/parque-de-san-juan-bautista.html
También en Facebook hay un grupo de el Parque.
Un saludo
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ResponderEliminarMario, como siempre, tan íntimo y personal. Me encanta leerte. Esa iglesia de San Juan Bautista tan conocida y familiar por todos nosotros. ¿Quién de los que andan por aquí no ha sido bautizado, hizo la comunión, se casó o en el peor de los casos, fue objeto de su funeral, en esa iglesia tan entrañable? A mí en concreto, también me bautizaron...¿te acuerdas cuando se le decía al padrino aquello de "eche, eche, eche, no se lo gaste en leche, eche usted padrino, no se lo gaste en vino"? ¡Qué tiempos! Un abrazo grande.
ResponderEliminarBuenas noches, Ricardo. Aquí estoy de nuevo paseando por mi barrio, gracias a ti.
ResponderEliminarHace unos días fui a casa de un amigo de juventud. Cogí un taxi hasta la calle Faustina Peñalver, le dije el número, y el taxista advirtió: “sí, al lado de la iglesia”. Yo le contesté: “no lo sé, es la primera vez que vengo por aquí.” Y de repente veo la Iglesia de mi niñez, la iglesia de San Juan Bautista, aquella que yo conocí en lo alto de un cerro, entre campos de trigo, ahora rodeada de bloques de viviendas. Un abrazo
Recuerdo el frío, la humedad de aquella casita en la que hacía tanto frío, que mi madre antes de acostarme pasaba una vieja plancha de hierro por las sábanas de mi cama.
ResponderEliminarLos resfriados eran continuos, al final enfermé del pulmón y guardé cama durante unos cuantos meses. Pero de lo que más me acuerdo es de aquel cielo limpio donde las estrellas brillaban como la plata pulida. Y de la Noche Vieja cuando mi madre tocaba las doce campanadas, todavía no teníamos radio, dando con un cucharón en el trasero de un gran barreño de chapa. Un fuerte abrazo para todos. Mario
Cierto Mario, la iglesia está totalmente rodeada de edificios, de ser la reina de la corona, ha pasado a ser una aguja en un pajar. En el Centro Cultural que está a su espalda se reúnen muchos antiguos vecinos de la Quinta, alguna vez he hablado con ellos. Cierto.... que frío hacía en las casas, las bolsas de agua caliente era la única forma de templar un poco las camas, aunque la humedad siempre se quedaba.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Hola, me llamo Ángel y pasé mi niñez en Ibarrondo, jugando más en las ruinas de Perlofil que en La Sical. Pero como este sitio es de la Quinta (así la conocía yo) voy a comentar algo que no he leído. Mi equipo de adolescente fue el Sporting Ibarrondo que jugaba como local en el campo de fútbol de el Cerro de la Cabaña, que conocíamos como el del "Pico Roto", por el pararrayos/cruz de la torre de la iglesia, caído al parecer por un rayo. En la temporada 1975/1976 (creo), y antes de fichar por el Ciempozuelos tras dejar el antiguo Castilla, filial del Real Madrid, Juan Señor jugó con nosotros esa temporada. Coincidimos, además, con Heraldo Becerra, oriundo del Atleti con el que ganó aquella Copa Intercontinental de 1974. Llegó a ser internacional por España pero fue retirado del equipo o lo dejó por no tener oportunidad de jugar, y como vivía en una casa de la calle Valdovín (antigua "casa de citas" del caminito, como la conocíamos), cercana a nuestro local social, se apuntó a acompañarnos. Temporada gloriosa aquella para el Sporting Ibarrondo que llevó al Pico Roto muchos aficionados ese año. Poco después Juan Señor se marchó a jugar con el Ciempozuelos y Heraldo se fue a Argentina donde falleció en accidente de tráfico en 1977.
ResponderEliminarHola Angel. Gracias por tu comentario. Muy buena la historia. Yo también jugué con Juan Señor, debió de ser en el 73, más o menos. Él nos hacía el favor de venir a jugar algún partido con nosotros (el equipo del Cerro), en un campeonato que se jugaba en los Dominicos, en la cuesta de la Moraleja.
ResponderEliminarUn saludo
Me llamo Alberto y escribo en nombre de mi madre: Manuela. Ella vivió en los Tres Ochos, 5. desde el año 39 hasta el 49. Iba al colegio de los patos con la profesora Teresa Ordóñez Reyero. La recuerda como una persona muy estricta y que la castigaba por ser zurda. Decía que la izquierda era el demonio y la derecha Jesús. Su vecina se llamaba Inés, que tenía una hija. Inés la cuidaba cuando mi abuela iba a trabajar y mi madre estaba enferma. También recuerda la casa donde vendían caramelos y chucherías y en frente, había una fábrica de ladrillos. Hizo la comunión en la iglesia del Cerro de la Cabaña con D. Lorenzo que era el que daba catecismo en el colegio, y si se aprendía las oraciones les daba una estampa. Mis abuelos, sin padres eran José y Mercedes y mis tíos (sus hermanos), Mercedes, Raúl, Gonzalo, Pepita y Manuela o también conocida como Loli (mi madre). Recuerda también largas estancias en la lecheria de Leoncio con las vacas, y ayudaba a repartir la leche con Paco y su prima Carmen.
ResponderEliminarTambién tiene el triste recuerdo del fallecimiento de su amiga Ana con 6 años por enfermedad.
Perdonad la extensión del Post, pero cuando le he leído a mi madre vuestros comentarios ha sido muy estimulante para su memoria.
Hola a todos.
ResponderEliminarQue ilusión me hace recordar tantos momentos vividos en la quinta de la paloma. Aunque también fue muy duro.
Vivía en la calle tres othos, soy Pilar Portela. Pasé allí mi infancia y mi juventud, vivíamos en una casa muy chiquitina con mis padres y mis dos hermanos, y de vez en cuando traían a a abuela. No teníamos agua corriente. Cuando llovía había muchísimo barro. Aunque a última hora se hicieron las calles.
tuve muchos amigos... Juan Señor, Su hermana Bea, Tomásin, su hermano Javi, Ana, Sergio, Nuria, Ana, Lourdes y tantos otros.
Pasabe mucho miedo cuando con 14 años tenía q ir a trabajar a Rok y tenía q pasar el descampado de la fábrica sical. O el descampado de García la mata para ir a Granda.
Cuantas y cuantas vivencias. Y q vecinos tan cercanos.
Muchísimas gracias por este bloc. Un saludo.
Bienvenida Pilar, y muchas gracias por comentarnos tus recuerdos.
ResponderEliminarUn saludo
Estoi mirando los comentarios de la quinta de la paloma y me viene a la memoria los años que he pasado en ese barrio desde el año 1940 asta 1970 soy hijo de la señora petra y señor justo mis hermanos Julián todavía vivo pepin fallecido a mi se me conocía como justito y me acuerdo de casi todos los que estáis escribiendo tantos recuerdos de ese gran barrio que me acuerdo todos los días un abrazo para todos
ResponderEliminarBuenos días, Justito. Disculpa que te llame por el diminutivo de Justo, pero tal y como dices a ti se te conocía así y así es como te recuerdo. Yo soy Juan Antonio, todos me conocen como Nono y soy hijo de Eduardo y Marcela (ya fallecidos) y hermano de Eduardito, a quien seguro recordarás mejor porque es más o menos de tu edad. Yo soy algo más joven. Vivimos en la calle de los Tres Ochos, vagamente me acuerdo de la casa y de algunas de las personas que vivían allí. En concreto, de tus padres, aunque solo sea por el nombre, me acuerdo perfectamente. Un abrazo fuerte.
EliminarHola soy Bernardo, viví en la calle José Romay, 33, justo a la espalda del Colegio Los Patos. Mi casa estaba en un patio en el que vivíamos 5 familias entre los que estaba mi tío Jesús y mi primo Jesús que padeció polio.
ResponderEliminarMis amigos fueron Carlitos , José Luis Leoncio, Pepin , José Francisco, sus hermanos.Javi, Juan Antonio, Antonio, Isiidoro, mi vecino Javi, Juan Carl9s Cañamero, José Antonio "koke".
Me siento muy orgulloso y afortunado de vivir en un pueblo dentro de Madrid. Nuestra Quinta
Buenos días, Bernardo. Muchas gracias por intervenir en este blog sobre nuestro querido barrio de la Quinta de la Paloma. Yo me llamo Juan Antonio, pero no creo que sea el que citas entre otros nombres de amigos tuyos. Viví en aquel barrio tan solo seis años y mi casa estaba en la calle de los Tres Ochos. ¿Podrías ampliar datos, por favor? Un cordial saludo.
EliminarCon mucho interés y cierta nostalgia leo los comentarios de este blog y por ello felicito a los creadores del mismo y a todos los intervinientes por su aportación en pro de la memoria que, aunque esta sea individual e intransferible, suele coincidir en los aspectos fundamentales con el recuerdo colectivo y, en ocasiones, la privilegiada memoria de unos ayuda a despertar de la nebulosa en la que ya vamos cayendo otros.
ResponderEliminarViví en la Quinta desde mis cuatro años de edad, de 1947 hasta 1950 en la Casa Alta, y desde 1959 a 1975 en José Romay 10. Mi nombre es Pepe, hijo de la Sra. Amelia y hermano de Elena. Pertenezco a una quinta (1943), quizá de las más numerosas de aquella época. De todos los amigos con los que conviví conservo un vivo y entrañable recuerdo, podría enumerar a decenas de ellos, algunos que ya no está con nosotros, especialmente a mi amigo del alma Ignacio, hijo de la Sra. Pilar,
Fallecido hace tres años en Montreal (Canadá), donde se marchó en 1970, mantuve con él una estrecha relación hasta su último día. Jamás dejó de estar presente en nuestras interminables conversaciones el añorado barrio de la Quinta, al que siempre recurríamos como fuente inagotable de recuerdos y que tanto influjo tuviera en nuestras vidas, conviniendo ambos con aquella definición del gran poeta, que de alguna manera venía a decir: “mi patria es mi niñez”, y también lo fue nuestra juventud, en aquel microcosmos, donde el teatro de nuestros sueños era tan grande en imaginación como reducido en oportunidades. Vaya con estas letras el homenaje, IN MEMORIAM, a mi amigo Ignacio.
Allí, donde las personas, hoy personajes entrañablemente magnificados, pugnaban por establecer en su hábitat el centro del universo, pues nada existía sin que las vivencias externas fueran expuestas y debatidas en aquel centro neurálgico de vida y pasión, Ágora de casticismo y de vehemencia desbordada; La Bandera, mucho más que una taberna. Aquella “Taberna Fantástica”, a la cual podría haber trasladado Alfonso Sastre, el dramaturgo, su obra homónima, que vino a situar en una del barrio de San Pascual.
Afortunadamente sigo gozando todavía con la presencia de mi amigo Julián Blanco, compañero de vivencias a lo largo de tantos años. Julián, hijo del Sr. Julián y la Sra. Justa, habitaban en la calle de los tres ochos. Ella, que todavía vive, pasa por ser la persona más longeva que yo haya conocido en nuestro barrio, en este año de 2022 cumplirá los 108 años de edad.
Otro queridísimo amigo, Antonio Robles, hijo del Sr. Santiago y la Sra. Aquilina, vivían en la calle José Romay, a la altura de la escuela. Con él he vivido y compartido trayectoria vital. Compañeros en el colegio Los Patos, ambos componentes de la rondalla que fundara aquel maestro de carácter humanista, Don José Egea López, a cuyas enseñanzas y orientación, algunos debemos nuestro posterior amor por la música y la literatura, tal fue el influjo de su docencia, a pesar del escaso tiempo que duraba la escolarización por entonces. Coincidimos también en nuestro servicio militar en el hospital del aire, para después batimos el cobre juntos, a lo largo diez años, desarrollando nuestra profesión de carpintero/ebanistería.
Podría extenderme entre tanta riqueza de paisaje y paisanaje, pero puede que no sea el momento. Tengo material al respecto y la intención de publicarlo, tendrá que ser en un futuro próximo, antes de que el otoño difumine en ocre el verde de los álamos.
Que bonito planteamiento (planteamientos) de la vida y del recorrido en el que nos encontramos inmersos sin darnos cuenta hasta que las canas (para el que disfrute de ellas) nos hacen repasar las historias de nuestra historia. Te animo a que más pronto que tarde compartas ese material, seguro que extremadamente interesante, pues con tu aportación seguro que a muchas personas le transmites una información que no tiene precio y aunque no te lo agradezcan personalmente seguro que lo agradecen pues nadie nació aún con la ciencia infusa y es muy interesante para saber donde estamos de donde venimos y lo que ha costado llegar hasta aquí aunque parezca fácil y que nos lo han regalado.
EliminarGracias anticipadas amigo Pepe Ruiz. 🂓
Muchas gracias Pepe Ruiz por tu comentario. Se nota que quieres al que fue tu barrio. A ver si algún vecino ve lo que cuenta y lo podéis comentar.
ResponderEliminarUn saludo
Hoy 30 de mayo a las 21:00 se clausura la Exposición sobre los barrios de San Juan Bautista y Colina, del distrito de Ciudad Lineal. Es bastante sugerente para los vecinos e interesados en la historia de esta zona. Está en el Centro Cultural San Juan Bautista, calle San Nemesio, 4, esquina a la calle Bueso Pineda. Anonimo.
ResponderEliminarHola! Soy vecina de la zona desde pequeña, pero soy bastante joven. Cuando yo nací ya no quedaba rastro de la Quinta de la Paloma, y aún así me ha encantado descubrir este blog y averiguar qué había aquí antes de que se construyera mi bloque de pisos. Personalmente, me da mucha curiosidad saber de dónde viene el nombre "Quinta de la Paloma". Entiendo que antes de ser un barrio humilde pudo ser una quinta de recreo, similar a la Quinta de los Moinos, Torre Arias o la Fuente del Berro; pero no he encontrado ninguna información al respecto. En un mapa del año 1900 vi que aparecía representada como una especie de jardín con un edificio en medio, lo que apunta en ese sentido. Me pregunto si las tierras fueron donadas o abandonadas y cómo empezó a formarse el barrio. Un saludo y gracias por este blog.
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